Nadie discute el papel central de Sevilla durante el Siglo de Oro, tanto en un plano estrictamente histórico como en la formación del imaginario de lo español y sus gentes, también en tiempos posteriores. Hay una línea que une a Cervantes o al burlador de Tirso de Molina con la idealización de la ciudad y, por extensión, de Andalucía, doscientos años después, gracias al Romanticismo. En esa visión romántica de Sevilla, la ópera Carmen de Georges Bizet, que ahora celebra el 150 aniversario de su estreno, constituye un auténtico hito.

La Asociación Banda de Música de Almagro interpretará cinco obras de compositores como el italiano Giacchino Rossini en El Barbero de Sevilla, Isaac Albéniz en su Suite Española (Sevilla), Joaquín Turina con su Orgía de las Danzas Fantásticas, Gerónimo Giménez con la Zarzuela La Torre del Oro y el mismo Georges Bizet pusieron a Sevilla en el epicentro de sus textos. Tramas y resonancias del teatro y la literatura clásicas inspiran obras de los siglos XIX y XX de estos grandes compositores. Piezas, en definitiva, en las que al acentuado carácter español se añade la confluencia enriquecedora e la música culta y la inspiración popular.