Me viene a la cabeza la metáfora del «cambio de oro por baratijas». Esa historia que representa el intercambio de cristalitos y cuentas de colores por oro entre los conquistadores españoles y los pobladores originarios, cuando llegaron a la América precolombina en busca del dorado. No sé si es por el debate de estos días ante el derribamiento de estatuas de esclavistas y los símbolos de la conquista, o porque sigue siendo una metáfora recurrente en algunas interacciones y transacciones políticas de la actualidad. Más allá de lo real y lo simbólico de aquellos hechos, lo que cuenta es la iniciativa del engaño, el trilerismo y el desprecio. Hay cosas que no cambian en las relaciones de poder. 
El mismo día en que los trabajadores ferroviarios denuncian públicamente que se mantiene la reducción del servicio de trenes Madrid– Talavera, eliminando hasta cuatro de esos servicios y dejando a esta ciudad con tan solo tres trenes a la capital; aparecen representantes del gobierno de España, de Castilla – La Mancha y Alcaldesa de la ciudad, prometiendo un nuevo estudio para ver la posibilidad de incorporar trenes lanzaderas que unan las dos ciudades. No es de extrañar que ahora nos deslumbren con esta propuesta. Es la moda en los debates sobre el futuro de la movilidad. De hecho, el Vicepresidente del gigante del sector ferroviario Alstom, afirmaba en 2019 que el futuro del transporte pasa por el metro, lanzaderas automatizadas y trenes de hidrógeno. ¡Y nuestra vía está sin electrificar! Cuando aún no han presentado el segundo estudio informativo del tramo del AVE Madrid – Oropesa (el primero caducó y este debió presentarse hace tres meses, una vez que el contrató de dos años para hacerlo expiró), nos anuncian una nueva promesa. Se llevan los trenes y nos traen estudios.  Y en la ciudad, salvo las denuncias habituales por los habituales, acatar y aplaudir. Todo en orden. 
El trasvase que no cesa, el Tajo secuestrado en su laberinto y sin previsión de que se imponga la cordura y la legalidad, o asome un atisbo de transición energética del Ministerio. El suelo industrial esperando una revisión y modificación del POM porompompero que aprobaron los mismos no hace tanto. Pero claro, aquel era un estudio para una Talavera de pisos y el AVE. Para qué necesitábamos industrias. Y el tren, pues en su tran tran… En Talavera de la Reina hemos entrado en una normalidad muy normal, la de siempre. Políticos de la jotaceceme que acuden de la capital a prometernos estudios y fiarnos tan largo las lluvias de millones y los millones de metros cuadrados de suelo industrial.