Si buscamos la definición de silo en la RAE podemos encontrar acepciones como: «lugar seco en donde se guarda el trigo u otros granos, semillas o forraje», «lugar subterráneo, profundo y oscuro» y «depósito subterráneo de misiles».
Escribo este artículo el Día Mundial de la Poesía, 21 de marzo, recordando que ayer recitábamos en el silo de Almagro, unos cuantos poetas, en un acto organizado por el Celcit, en homenaje a la insigne escritora almagreña Manolita Espinosa.
El lugar que los encargados de este evento: la poeta María José Redondo, el director del Celcit Luis Molina y el periodista Diego Farto eligieron, fue el silo de esta preciosa localidad. Este lugar está incluido dentro del proyecto Titanes de la Diputación provincial de Ciudad Real para rehabilitación y embellecimiento de los silos. Además de esta institución, el Ayuntamiento de esta localidad y la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha llevaron a cabo un extraordinario plan de empleo que rehabilitó el edificio para ser usado como espacio multidisciplinar, de ocio, asociativo y cultural de la ciudad.
Podemos decir entonces que, a día de hoy, este monumento, antes usado para albergar grano, es utilizado para almacenar palabras, poemas, cuentos, relatos, canciones u obras de teatro. De este último género artístico el Día Mundial será conmemorado muy pronto también, el 27 de marzo.
La RAE también nos hable de que podían almacenar misiles, en cambio, ahora se guardan los  sueños y la alegría que nos proporciona el arte. Y el arte nos llena de vida, nos da vida. 
Hoy, más que nunca, conviene darse cuenta de esta preciosa metáfora: la cultura siempre salva y alimenta.
La otra acepción que se otorga a este término se refiere a «lugar subterráneo, oscuro y profundo».  No cabe duda que el arte consigue sacar al exterior lo que llevamos dentro o consigue que lo liberemos al sentirnos identificados con las maravillosas obras que una gran cantidad de artistas son capaces de crear.
En las paredes de este silo de Almagro ha quedado inmortalizado un poema de Manolita Espinosa, debajo de su retrato, realizado por Ryuji Sato. Acompañan a este mural, en este lado del silo, otros de Eusebio Loro sobre el Quijote y de Jesús Peinado sobre Lorca.
Ojalá este arma cargada de futuro que es la poesía, tal y como la definió Celaya, pudiera ser disparada para acallar las otras, las que tanta muerte están sembrando en diferentes y demasiados rincones del mundo.