Miguel Ángel Jiménez

Comentario Dominical

Miguel Ángel Jiménez


El poder de la oración

12/05/2023

"Pedid y se os dará, buscad y encontraréis, llamad y se os abrirá; porque todo el que pide recibe, quien busca encuentra y al que llama se le abre". Esta cita, literal del evangelio de san Mateo en su capítulo 7, versículos 7 y 8, comprendida en su literalidad, nos lleva a clara confusión. La interpretación de la Sagrada Escritura no comienza y concluye en un versículo aislado, sino que, desde una sola frase o pasaje, se busca apoyo y sentido desde toda la Biblia. La comprensión bíblica es, por tanto, desde la armonía. Los dos versículos anteriores, no se corresponden con la oración de Jesús en Getsemaní: «Padre mío, si es posible, que pase de mí este cáliz». En buena lógica, Dios debería haber escuchado la súplica agónica de Jesús. No es así.
La oración nos abre a la voluntad de Dios, que puede ser misteriosa, incluso, incomprensible. Elevar nuestra mirada y nuestras manos a Dios supone una apertura profunda de nuestra vida y de nuestro corazón a lo que acontece. No creemos en una religión mágica o de superstición en la que se intercambia con la divinidad una serie de sacrificios o de ofrendas a cambio de favores. Si fuera así, nunca entraría en los cálculos la cruz, ni la entrega sacrificial por amor, ni la renuncia. 
Cuando ahora pedimos que llueva, incluso pensamos en rogativas, lo hacemos confiando profundamente en Dios, en su providencia. Descubriendo que lo que somos está en sus manos, también, sobre todo, en los momentos de dificultad. La oración es confianza, apertura, relación con Dios, que siempre es mayor, que siempre sabe más. .

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