Ojalá que Puertollano vuelva a ser el epicentro industrial de la región. La carrera en la que está inmersa la ciudad para acoger la futura Agencia Espacial Española es uno de esos desafíos por los que merece la pena apostar al todo o nada. Aún se desconoce cómo será el proceso y si existen condiciones para que Puertollano pueda acceder a ese centro tan jugoso para una ciudad de su tamaño y por las dificultades por las que atraviesa. Existe un consenso desde las distintas autoridades para que el municipio recupere el empleo industrial. Hasta entonces, vivía al margen de las necesidades del resto de la provincia, asfixiadas y ahogadas por el boom inmobiliario, por los vaivenes del sector agroalimentario, por una tasa de desempleo que, en Puertollano, en su edad dorada, desconocía. Sin embargo, el deterioro de este polo industrial, alimentado principalmente por la refinería de Repsol, se acrecentó en la pasada crisis económica hasta padecer una sangría poblacional digna de estudio. Desde entonces, se ha intentado revivir con distintas iniciativas y con la instalación de centros, no así con infraestructuras básicas como la continuidad de la A-43 hacia Extremadura. En esa búsqueda por retener y generar industria, las energías renovables han venido a suplir de alguna manera el hueco que van dejando poco a poco los combustibles fósiles. En esa reconversión de la energía y del sector, Puertollano busca de nuevo codearse con otras zonas industriales de nueva creación. Aunque está por ver cómo se desarrollan y se implementan esas energías limpias, la localidad cuenta con una baza en la que se deberían redoblar todos los esfuerzos, políticos, económicos, empresariales y sociales para que Puertollano consiga ser el futuro centro de la Agencia Espacial Española. En esa promesa del Gobierno por descentralizar las instituciones del Estado, es una oportunidad para poner en práctica esta política en una provincia olvidada históricamente por las estrategias económicas de los Ejecutivos centrales. Alguien se podrá conformar con algún centro de talla menor o con sedes de fábricas relevantes. Sin embargo, si uno mira más allá de las rivalidades de Madrid y Barcelona, descubre auténticos centros logísticos de referencia internacional en ciudades medias. Aquí nos tenemos que agarrar al sector primario para aliviar al mercado laboral. La principal actividad del 70% de los municipios de la provincia sigue siendo la agricultura. Los otros candidatos por esta carrera por conseguir la 'Nasa española'-el Gobierno ha descartado Madrid- son Sevilla, León y Ávila, aparte de las madrileñas Tres Cantos y el Robledo de Chavela. Como siempre, ya hay voces del sector aeronáutico que piden que se quede en Madrid porque existe un polo de talla internacional al mismo nivel o parecido al de la ciudad francesa de Toulouse, con una de las principales sedes del gigante Airbus y también con la agencia espacial francesa (CNES). Esas mismas voces aconsejan que, de instalarse fuera de la capital española, al menos esté bien comunicada, claro, con Madrid.  De las candidatas, solo le gana en tiempo Tres Cantos. Puertollano además cuenta con una de las principales empresas aeroespaciales del país, Deimos, con uno de los cielos más limpios y ya de paso y por qué no, esta agencia sería una buena oportunidad para dar un empujón al malogrado aeropuerto para que la provincia vuelva a mirar al cielo.