José Rivero

Doble Dirección

José Rivero


Enigmas varios

15/02/2023

Uno de los sentidos de enigma se refiere al «enunciado de sentido artificiosamente encubierto para que sea difícil de entender o interpretar». También puede señalar a «la realidad, suceso o comportamiento que no se alcanzan a comprender, o que difícilmente pueden entenderse o interpretarse».
El primero de los enigmas tiene que ver con la actual posición política de Ramón Tamames, estudiando la propuesta de VOX para encabezar la moción de censura contra el gobierno de Pedro Sánchez. Sabiendo como todos saben la procedencia política de Tamames, no deja de haber algo enigmático. Miembro del PCE en los años 70 y 80, candidato a la Alcaldía de Madrid, donde desempeñó la primera tenencia de Alcaldía con Tierno Galván como alcalde, ahora ha aceptado estudiar la conveniencia de asumir la invitación de Vox, cuya posición política se halla en las viejas antípodas de las sostenidas por aquel Tamames que congregaba esperanzas y admiración.
De igual forma –otro enigma– que la sesión de investidura del escritor hispano peruano Mario Vargas Llosa –premio Nobel de Literatura y miembro de la Academia española de la lengua– como miembro de la Académie française, sillón número 18 ocupado por Michel Serre, ha acarreado otro enigma de estos días. Y no me refiero a su discurso donde dejaba ver que «la literatura salvará la democracia o perecerá con ella». ¿Qué es lo que salva y qué es lo que muere? Si no más bien a la doble evidencia de la ausencia de alguna presencia gubernamental –algún acompañamiento del Ministerio de Cultura o de la embajada española en París, dada la excepcionalidad del caso– y al acompañamiento del rey emérito –que se desplazó desde Abu Dhabi– para sortear ese acompañamiento y tentar la suerte monárquica del escritor que fuera republicano en sus orígenes. 
El enigma de Antonio Garamendi resulta tanto de su posición comprometida como presidente de la CEOE – confederación patronal española– como de su negativa a concurrir a la mesa de negociación que acordaría la subida del salario mínimo a 1.080 euros. Garamendi ha pasado de ser, como presidente de CEOE, trabajador autónomo del RETA, a trabajador asalariado de la patronal. Con un salario actualizado –dicen que corresponde al contrato de alta dirección– de 400.000 euros, por lo que pudiera estimarse que el contrato anterior como falso autónomo tuviera indicios de irregularidad.
La parte final del enigma tiene que ver con la coexistencia de la epidemia de la plaga de la viruela ovina, al tiempo que se aprobaba la ley de bienestar animal. Como si una coincidencia arrastrara a otra.