ToroVerde promete que sus trabajadores serán conquenses

Leo Cortijo
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El máximo responsable de la compañía, Jorge Jorge, explicó que la naturaleza de la compañía pasa por crear "sinergias" con las empresas locales, con la firme intención de "trabajar juntos".

ToroVerde promete que sus trabajadores serán conquenses - Foto: Reyes Martínez

El desembarco en Cuenca del parque de aventuras ToroVerde suma un nuevo entero. Los ayuntamientos de Cuenca, Sotorribas y Mariana, la Diputación Provincial y la Junta de Comunidades rubricaron el memorándum de entendimiento con la empresa puertorriqueña que pretende levantar esta infraestructura en plena sierra de Bascuñana, así como con la compañía Nayara Resorts, que pondrá en marcha un hotel de alto standing anexo al parque. Durante la puesta de largo del proyecto se volvieron a recordar las mareantes cifras de lo que este polo de atracción turística puede suponer, destacando sobremanera el medio millar de puestos de trabajo directos que pretende crear.

En este capítulo, el máximo responsable de ToroVerde, Jorge Jorge, avanzó su deseo de que todos los empleados de este parque de turismo activo sean conquenses. «Venimos a ser parte de ustedes porque ustedes ya son parte de nosotros», afirmó para ahondar en la naturaleza de su compañía, que pasa por crear «sinergias» con las empresas locales, con la firme intención de «trabajar juntos». Habló de mostrar un «apoyo vital» a la comunidad, «porque no podemos crecer si ésta no crece con nosotros». Por esa razón valoró positivamente las reuniones que ya ha mantenido con representantes de la patronal conquense, así como con productores de la tierra, haciendo especial hincapié en su apuesta por el producto de cercanía dentro de la oferta culinaria del parque, que será puntera.

Jorge Jorge, que se guardó «de recuerdo» el bolígrafo con el que estampó su firma en el documento, mostró su gratitud por la «euforia» que les ha mostrado la ciudadanía ante su llegada y por el buen recibimiento que han recibido por parte de las diferentes administraciones. Así, confesó haberse «enamorado» de Cuenca porque «va completamente de la mano de nuestra filosofía», que es la fascinación por la naturaleza. «El nuevo color del oro es verde, y eso entronca con nuestro espíritu», remató para explicar además que están haciendo «lo incondicional» para que este proyecto sea «único en el mundo» porque casa con muchos de los «valores agregados» que posee la ciudad.

«La materia prima ya existía, lo único que hacemos es empaquetar ese producto para vendérselo a todo el mundo, y estamos convencidos de que lo vamos a lograr». Tanto es así que se mostró tajante al afirmar que «aquí el producto más grande no es ToroVerde ni Nayara, es Cuenca». Una ciudad que –sentenció– «dentro de poco tiempo todo el mundo sabrá dónde está». Esa forma de pensar y maniobrar es muy similar a la de su homólogo en Nayara Resorts, Leo Ghitis, la otra gran pata de esta catedralicia inversión que ronda los 37 millones de euros. Y es que junto al ecoparque de ToroVerde llegará también un gran alojamiento que promete situar a Cuenca «en el mapa mundial del turismo de alto nivel».

Esta compañía, que actualmente cuenta con seis hoteles –tres en Costa Rica, dos en Chile y uno más en Panamá–, además de otros dos en vías de desarrollo, tiene entre ceja y ceja atraer a visitantes «diferentes» a los habituales y de todo el mundo. En palabras de Ghitis, todos los alojamientos de su firma tienen en común dos cosas: una, que están ubicados en «lugares de belleza excepcional y extraordinaria, ya sea por el entorno natural o por el patrimonio cultural o histórico». Y dos, la pasión por el turismo «regenerativo», y es que «ya no es suficiente solo con cuidar el medio ambiente». En un camino calcado al de Jorge, Ghitis dejó claro que en los hoteles Nayara todos sus proveedores pertenecen a la comunidad local, al igual que los colaboradores de la firma. Además, en materia de empleo, ofrecen puestos con salarios «dignos» y «oportunidades de crecimiento profesional y personal».

El CEO hotelero despejó además la incógnita de por qué han elegido Cuenca. «Lo tienen todo y más», subrayó, «no solo tienen un paraíso de naturaleza, también tienen historia, arqueología, gastronomía… Para nosotros haber llegado aquí es encontramos en el paraíso». Tal y como explicó, dentro de la investigación de mercado que han llevado a cabo para su definitiva instalación en territorio conquense, han comprobado que mucha gente no conoce Cuenca, pero que ésta «presenta una gran oportunidad», y que su intención es atraer turistas no solo de Europa, sino también de Estados Unidos y Australia.

Ambas sociedades prevén la construcción de un espacio con cuatro áreas diferenciadas. En primer lugar, un hotel diseñado para vivir «experiencias únicas». En segundo lugar, una zona de actividades «hechas a medida» donde se segregará adrenalina con tirolinas, recorridos con puentes colgantes y oscilaciones de péndulo que se integrarán en el paisaje. El tercer elemento del parque será un village que prevé 5.000 visitantes en temporada alta y que acogerá instalaciones comerciales, de entretenimiento y restauración. En cuarto y último lugar, una zona dedicada a ecopistas, con rutas de e-bike y senderismo a través del paisaje natural sin alteraciones. A lo largo de esta ruta habrá una serie de paradas sensoriales, promoviendo la interacción y la diversión de los visitantes.

Atracción de empresas. Durante la firma del memorándum, la consejera Patricia Franco agradeció la «calidad profesional y humana» de los responsables de ToroVerde y Nayara Resorts, que personifican una «gran representación de la calidad que atesora el proyecto». Una inversión en la sierra de Bascuñana, entre la pedanía de Tondos y los municipios de Sotos y Mariana, que «va a contribuir al crecimiento de la economía local y regional, y del ecoturismo en Cuenca y en Castilla-La Mancha, como uno de los elementos diferenciales de nuestra oferta turística». Además, la titular de Economía, Empresas y Empleo en la Junta de Comunidades destacó que con esta infraestructura Cuenca «promociona al máximo todo su potencial», de la mano de la historia, el patrimonio, la naturaleza y la gastronomía.

Asimismo, la consejera alabó el trabajo realizado desde el primer contacto a través del IPEX y de la Dirección General de Empresas y subrayó como «determinantes» para que este barco llegue a buen puerto dos elementos en el trabajo del Ejecutivo autonómico: la voluntad y el deseo de querer hacer, y la constancia. «Hemos sido perseverantes para cumplir nuestros objetivos y proyectar internacionalmente nuestra región», argumentó.

Darío Dolz puso sobre la mesa la «ilusión» que este proyecto ha despertado entre los conquenses. Un proyecto, añadió, que «va a cambiar la idiosincrasia de esta ciudad». El alcalde explicó que el trabajo para la puesta en marcha del parque «acaba de empezar» y que para obtener un resultado fructífero «vais a sentir de una forma si cabe más especial de lo que ya la estáis sintiendo la colaboración de todas las administraciones».

Por su parte, el presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana, dirigió su foco hacia el «efecto dinamizador» del proyecto, al que calificó de «transformador». «Encaja a la perfección y viene como anillo al dedo para Cuenca y su provincia, y es capaz de cambiar la dinámica de este territorio», afirmó. De esta forma, manifestó el compromiso de la institución provincial para «empujar» hacia la meta final «cuanto antes», materializando «las infraestructuras que estos municipios necesiten para que salga adelante». «A partir de ahora vamos a compartir un futuro conjunto y cargado de ilusión y de ToroVerde... verde esperanza», concluyó.

«Un baño de ilusión y autoestima». «Estamos en una ciudad de ensueño materializando un sueño que empieza a coger forma y, además, combatiendo un cierto nivel de escepticismo». Esa fue una de las primeras frases que acuñó Emiliano García-Page durante la presentación del parque de turismo activo ToroVerde, cuya llegada «nos ha permitido soñar despiertos». El presidente de Castilla-La Mancha argumentó que este proyecto «habla por sí mismo» y dice que «va a ser sensible con el medio ambiente y que va a romper las fronteras de las expectativas».

Además, desveló algunos detalles interesantes como que los 500 puestos de trabajo pueden aumentar con futuras ampliaciones y que «además están muy bien pagados» o que la empresa «está a punto de conseguir técnicamente» la tirolina más grande del mundo. Asimismo, hizo hincapié en que se prevé que en torno a 200 empresas conquenses puedan trabajar con este grupo americano y, de esta forma, consigan «una amplia cuota de mercado».

«Este tipo de proyectos son los que se necesitan», dijo García-Page, que también comentó que en esta época de crisis e incertidumbre «este tipo de noticias son de una importancia extraordinaria». «Un baño de ilusión y autoestima en un momento en el que muchos españoles viven con temor a los precios y al día de mañana». «Aquí trabajamos de frente, habéis llegado a una tierra noble y que os va a corresponder», recalcó el máximo responsable del Ejecutivo autonómico, que ensalzó los valores de ToroVerde con un magnífico símil taurino, destacando «la fuerza, la nobleza y el empuje» del toro bravo, imagen de la compañía, y «parte esencial» de la tauromaquia.