Ángel Villarino

RATAS DE DOS PATAS

Ángel Villarino


Portugal

03/09/2022

Variaciones de cosas que nos resultan familiares. Muchas de nuestras afinidades y gustos, una vez maduros, encajan bien en esta descripción. A mi me sirve para explicar por qué me gusta tanto Portugal y por qué vuelvo cada vez que tengo ocasión.  
Creo que es el país que más me gusta de todos los que he conocido. Como les pasa a los enamorados, le encuentro todos los encantos de los que he conocido, pero sin la mayoría de sus defectos. Sin tanto ruido, ni tanta pretensión como España o Italia.
Me asombra la transformación que han sufrido en pocos años sus ciudades y sus pueblos. Y me sigue sorprendiendo cuando comparo las cosas con como eran  la primera vez que pisé Lisboa. El contraste entre el Portugal que aprendí de niño -con sus tópicos- y el que he ido aprendiendo con los años.
Me gusta su cocina, me gustan sus playas oceánicas, sus veranos frescos, sus ciudades y hasta sus oficinas de correos. Me siento siempre más cómodo aquí que viajando por España. Si pudiese elegir un lugar en el que retirarme, Portugal tendría casi todas las papeletas. Una casita de azulejos frente al Atlántico, no muy lejos de Oporto. Algo sobre los acantilados del Algarve. Una versión de los sitios en los que he sido feliz.
Pero   lo que más me gusta es la gente. Simpática, pero sin histrionismos. Instruida, pero sin la necesidad de exhibirlo. Discreta, pero frontal. Como siempre en estos casos, se trata de generalizaciones basadas en experiencias anecdóticas y reforzadas por sesgos. No se de que otra manera se construyen las afinidades y los gustos.

«Creo que Portugal es el país que más me gusta de todos los que he conocido. Como les pasa a los enamorados, le encuentro todos los encantos de los que he conocido, pero sin la mayoría de sus defectos. Sin tanto ruido, ni tanta pretensión como España o Italia»

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