Es el legado del profesor Jèrôme Lejeune: investigar, cuidar y defender a las personas con Síndrome de Down o cualquier otro tipo de discapacidad con origen genético. Humanidad, especialmente con los más débiles e indefensos. La fundación apeló, con  Inés de Pracomtal, una niña y actriz con síndrome de Down, al Tribunal Europeo de Derechos Humanos porque el Consejo Audiovisual francés primero y el Consejo de Estado después habían prohibido la difusión de un video en espacios publicitarios por considerar que no eran los adecuados. El video se titula Querida futura mamá. El mensaje es claro para la futura madre: quince personas de distintas nacionalidades se dirigen a ella transmitiéndole esperanza en la futura maternidad de un niño con esa discapacidad.  Se puede buscar con mucha facilidad en internet -gracias a Dios que existe Internet-. 
Es una sociedad que aplaude a un goyizado Jesús Vidal como actor revelación de la manera más rabiosamente moderna elevando la película Campeones al nivel de leyenda y, al mismo tiempo, aborta a los niños a los que se les detecta la más mínima malformación o posible discapacidad. Si tiene que ser, en casa de otros.
Solo parece haber espacio en nuestra sociedad para apariencias falsas y vacías que duran lo que un destello deslumbrador. No nos confundamos. No todo es espectáculo ni postureo y casi todos lo sabemos. Detrás de las bambalinas es donde se juega la historia. Vamos a defender la vida que se sostiene en las realidades cotidianas. La dignidad que tantas veces y de tantas maneras es herida y atacada.