El empleo público llega a la cifra más alta desde 2019

M. Lillo
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CSIF afirma que pese al incremento, sobre todo del último año, las plantillas siguen siendo deficitarias y UGT pide que ese aumento de efectivos se mantenga

Efectivos sanitarios trabajando durante la pandemia de coronavirus. - Foto: Rueda Villaverde

El 'ejército' de personal sanitario que ha sido necesario para combatir la pandemia, los refuerzos de personal docente que ha tenido que gestionar los cursos escolares del COVID y los efectivos que se pusieron en marcha en distintos ayuntamientos para atender las necesidades que han surgido en estos años marcados por las restricciones del coronavirus, han incrementado la cifra de empleados públicos que hay en la provincia de Ciudad Real.

De hecho, a enero de este 2022, la última fecha recogida en el Boletín Estadístico de Personal al Servicio de las Administraciones Públicas, la provincia contaba con 33.645 empleados públicos, lo que supone la cifra más alta desde la prepandemia, en concreto desde enero de 2019, cuando precisamente se alcanzó un récord de hasta 35.433 efectivos que se desplomó, sin embargo, el semestre siguiente hasta situarse en el entorno de los 31.000.

Así, en enero de 2020, justo antes de que irrumpiera la pandemia, había 31.459 empleados trabajando al servicio de los distintos organismos de las Administraciones y toda esa potente maquinaria se ha ido 'alimentando' poco a poco con más personal que se refleja semestre a semestre en las estadísticas hasta superar los 33.000 señalados.

Esto supone que en estos dos años de pandemia la provincia ha ganado 2.186 empleados públicos, fruto, por ejemplo, de las convocatorias que se han desarrollado para docentes en la región o de los procesos que se han llevado a cabo en los ayuntamientos para cubrir algunas de esas muchas plazas que se necesitaban o se perdieron años atrás. Al poner la lupa en los datos se constata que este tirón de la contratación pública se debe al esfuerzo de la Administración autonómica, con 655 efectivos más desde enero de 2020, y sobre todo de las administraciones locales, con hasta 1.578 efectivos más en este periodo, mientras que la contratación en el Estado ha bajado en 47 personas. No obstante, el reto a abordar sigue siendo el de la temporalidad, que en el país llega al 32 por ciento, y que se debe situar en dos años en el 8%, y de ahí que muchos Consistorios y otras instituciones hayan activado el mecanismo de las convocatorias para cumplir con los plazos que marca la nueva legislación y abordar dicha situación.

Desde el sindicato CSIF, su presidente provincial, Lorenzo Domínguez, afirma «a pesar de las cifras que ofrece el último Boletín Estadístico del personal al servicio de las administraciones públicas, que reflejan el incremento de un millar de trabajadores respecto a enero de 2021, las plantillas continúan siendo deficitarias». De hecho, prosigue, «sólo han crecido de manera consistente en las administraciones locales, mientras que en Sanidad continuamos con el empleo eventual, en educación se continúa despidiendo a los interinos en verano y en la Administración General del Estado se siguen perdiendo efectivos, sector en el que además contamos con las plantillas más envejecidas».

El representante de CSIF se refirió además al problema de la temporalidad y para ello echó mano también de los datos. «Hay que constatar la temporalidad que padece el empleo público, y que se refleja en que aún no se han recuperado los niveles previos a la pandemia: si a enero de 2022 hay 33.645 empleados públicos en la provincia de Ciudad Real, a enero de 2019 había 35.433; es decir, hay 1.788 trabajadores menos», dijo haciendo esa lectura en relación con el pico de contratación que llegó a haber y que, sin embargo, descendió hasta los 31.000 en el semestre siguiente. «Para CSIF es vital consolidar los servicios públicos, fortalecerlos, y para ello es preciso convocar procesos selectivos amplios», subrayó Domínguez.

Asimismo, desde el sindicato UGT, su secretaria general en Ciudad Real, Alfonso Álvarez, afirmó que «es cierto que se ha creado plantilla debido a la crisis sanitaria» y lo que pide este sindicato es precisamente que ese personal se mantenga. En este sentido, agregó que los empleados públicos repercuten en la calidad de los servicios que se prestan y de ahí que reclamó «que aprendamos la lección» de la pandemia y se apuesta por su calidad.