Dos mujeres denuncian haber sido víctimas de pinchazos

Hilario L. Muñoz
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La Delegación del Gobierno señala que en ninguno de los casos se han encontrado sustancias tras en análisis toxicológico realizado a las denunciantes

Dos mujeres denuncian haber sido víctimas de pinchazos - Foto: Rueda Villaverde

La provincia de Ciudad Real ha registrado dos denuncias de mujeres víctimas de pinchazos con el objetivo de introducirles alguna sustancia para su sumisión química. Se trata de un dato en el que confirman tanto la Consejería de Igualdad como la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha, que señalaron a La Tribuna que se trata de dos denuncias presentadas en sendos municipios de la provincia, no en la capital, sin detallar la localidad en concreto. Esta semana desde la Junta de Comunidades se informó que llegaban ya a diez el número de denuncias conocidas en la región, repartidas en todos los territorios, salvo Guadalajara.

Una de las denuncias ciudadrealeñas fue una joven que notó un pinchazo y que tras acudir al médico de Urgencias decidió poner la denuncia. En este caso y en el otro se trata de denuncias que no han sido corroboradas por los análisis toxicológicos, ya que han dado resultado negativo, no se han encontrado sustancias en ninguna de las dos ciudadrealeñas que han denunciado ante la Guardia Civil o el Cuerpo Nacional de Policía.

Esta semana, la portavoz del Gobierno regional y consejera de Igualdad, Blanca Fernández, anunció la actualización del protocolo de actuación ante las posibles agresiones a mujeres con objetos punzantes y con el objeto de lograr la sumisión química. En este sentido, avanzó que la Junta de Comunidades se personará como acusación popular en estos casos «si hubiese alguna agresión sexual derivada de la sumisión química». Dicho protocolo marca puntos de actuación ante posibles pinchazos por parte de profesionales sanitarios y analiza el fenómeno desde la denuncia tanto si el consumo es voluntario como involuntario de las sustancias tóxicas, si estas se aprovechan para cometer un delito.

El Consejo General de Enfermería pidió a primeros de agosto este tipo de protocolos ante «los graves riesgos para la salud que pueden ocasionar los pinchazos de discotecas» y el Colegio de Enfermería de Ciudad Real cuenta con una guía sobre cómo actuar ante una posible situación de riesgo en su web.