Uno de los objetivos y compromisos del Ayuntamiento de Calzada de Calatrava era que el Castillo de Salvatierra, construido a partir del siglo X, recibiera a sus primeros visitantes, y ese deseo se ha convertido ya en realidad. La fortaleza abrió sus puertas al público la pasada primavera, y desde entonces ha recibido más de 200 visitas. Una cifra que llena de satisfacción al equipo de Gobierno, pero especialmente a su alcaldesa, Gema García, quien en declaraciones a La Tribuna recuerda que la idea de que la gente pudiera conocer los encantos del castillo se ha convertido en realidad gracias a los trabajos de accesibilidad que se han hecho en el entorno. Así, además de ser la primera vez que esta fortaleza se abre al público también es la primera vez que se realizan este tipo de trabajos.
Debido a la situación del castillo, con zonas «muy peligrosas» por los aljibes, pudiendo provocar así «alguna posible caída mortal». El Ayuntamiento de Calzada de Calatrava ha mejorado el acceso, creando una serie de sendas y recorridos para facilitar la llegada de visitas, además de llevar a cabo un estudio de patologías de toda la edificación «de cara a posibles labores de mantenimiento y recuperación», argumenta la regidora. El objetivo, recalca, es saber las zonas donde existan mayores problemas. Así, señala, era importante estudiar la estabilidad de la torre del homenaje, «símbolo del municipio que aparece en el escudo», al «tener una grieta que la atraviesa totalmente». Por ello, «se ha analizado por primera vez de forma más profunda, científicamente hablando, toda la riqueza del espacio, es decir, del castillo de Salvatierra como del castillo de los Cristianos», este último de titularidad pública, es otra pequeña estructura fortificada que se levanta en la sierra de la Atalaya, a unos 600 metros en línea recta del castillo de Salvatierra, del que funcionaba como padrastro, y que debió ser construido a principios del siglo XIII.
García señala además que tanto el estudio «de cómo se encuentra la estructura y por dónde habría que comenzar su mantenimiento y recuperación», así como la mejora de accesibilidad, ha supuesto una inversión de unos 30.000 euros cofinanciados por el Grupo de Acción Local (GAL) Campo de Calatrava. En este sentido, insiste además en las labores de mantenimiento que serán necesarias a lo largo del año, por lo que se prevé una inversión anual de unos 10.000 euros para su conservación y mantenimiento.
Las visitas a la fortaleza se llevan a cabo a través de visitas guiadas y con un número máximo de participantes de 25 personas. «La visita libre no es adecuada por las cuestiones de peligro, por lo que los expertos historiadores han considerado imprescindible que las visitas sean controladas y guiadas», argumenta, al tiempo que señala que las visitas se programan en función de las personas interesadas en conocer la fortificación.
El castillo. El castillo de Salvatierra, cuyo origen puede remontarse a época Omeya, fue profundamente remodelado durante la segunda mitad del siglo XII y principios del XIII tanto por los almohades como por los calatravos en su etapa de ocupación entre los años 1198 y 1211, período en el que la orden se refundó y pasó a denominarse Orden de Salvatierra. La defensa heroica de los caballeros durante la campaña almohade de 1211 desencadenó la decisiva batalla de Las Navas de Tolosa en 1212.
Pero por encontrarse en una propiedad privada, este castillo siempre ha permanecido cerrado a la visita pública, de ahí que el proyecto suponga una importante iniciativa para la puesta en valor de los recursos patrimoniales no solamente de Calzada, sino de todo el Campo de Calatrava. Y es que, aunque se encuentra en un avanzado estado de ruina, aún son perceptibles imponentes estructuras arquitectónicas como la torre del homenaje, grandes aljibes y espacios abovedados, así como poderosos recintos amurallados con mampostería de cuarcita. En su arquitectura destacan elementos como la sillería de piedra volcánica para el encadenado de las esquinas de las torres.
Historia y patrimonio, recuerda la alcaldesa de Calzada de Calatrava, que ha sido también protagonista de las populares jornadas de Patrimonio Calatravo, que han alcanzado ya la segunda edición y en la que ha participado la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), con el objetivo de poner en valor toda la riqueza patrimonial de la localidad y de la comarca.