Un título continental no se conquista por casualidad y, en el caso del triunfo en la Eurocopa de la selección femenina absoluta en Portugal, una porción del éxito recae en Leo Herrera.  

El entrenador de Pozuelo de Calatrava es integrante del cuerpo técnico que lidera Claudia Pons como analista táctico y lleva meses trabajando de forma discreta. En la sombra, el manchego ha ido contribuyendo a la preparación de esta fase final del Campeonato de Europa analizando el juego de las rivales y ayudando en lo que hiciera falta en cuanto a entrenamientos y preparación.

Por ello, tiene claro que este título europeo se forja desde «la fortaleza del grupo. Es un grupo absolutamente increíble. En la final se demostró su inconformismo, es un equipo que ha trabajado mucho, un grupo humano brutal», explicó.

Tras dos aplazamientos por la pandemia, el camino hacia el título «no ha sido nada sencillo», explica Herrera, que a partir de esta temporada ejercerá también como segundo entrenador del Movistar Inter. «El grupo se creció ante las adversidades, como lesiones, y en la final mostró su capacidad de resiliencia».

De cara al futuro, espera que este título «sea un respaldo y pueda ayudar a dar más visibilidad al fútbol sala femenino, que está muy lejos de lo que merece», concluyó.