La marihuana sigue siendo la droga que más se incauta en la provincia de Ciudad Real, aunque continúe reinando la cocaína y subiendo el consumo de heroína fumada, no inyectada como en los ochenta cuando hizo estragos y acabó con tanta gente. A mediados de los noventa empezó su declive, pero en los últimos años se ha registrado una tendencia al alza, indican a La Tribuna fuentes policiales.

Según los últimos datos que acaba de hacer públicos el Ministerio del Interior y cuyo periodo objeto de análisis es 2020, han registrado 2.270 denuncias por hechos relacionados con el tráfico de drogas. La colaboración ciudadana es muy importante en la lucha contra el tráfico de drogas, pero la mayoría de las incautaciones son fruto del trabajo policial, de la investigación.

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se incautaron en la provincia de Ciudad Real más de 537 kilos de drogas y detuvieron a 187 personas por hechos relacionados con el tráfico de estupefacientes.

La 'maría' es la sustancia que más se aprehende en la provincia de Ciudad Real y en el periodo objeto de estudio representa el 58,26% al sumar 313.031 gramos intervenidos del total de incautaciones. Le sigue el hachís que supone el 39,83% con 214.541 gramos decomisados, un 77,83% menos que el año anterior.

En el tercer puesto se encuentran las incautaciones de plantas de cannabis, que también anotan una disminución, concretamente de un 26,44%, con 5.121 aprehensiones. Sin embargo, a lo largo de este año que está a punto de finalizar ha habido un aumento de incautaciones tanto en la demarcación de la Policía Nacional como de la Guardia Civil.

El cultivo de marihuana sigue dibujando una curva ascendente en la provincia desde hace unos años, apuntan las fuentes. En agosto de este año la Policía Nacional se incautó de casi 200 plantas de marihuana en Puertollano, municipio donde unos meses después volvía a protagonizar otra gran aprehensión de esta sustancia.

La marihuana es la droga que más se incauta en la provincia de Ciudad Real, según el informe elaborado por el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado de la Secretaría de Estado de Seguridad en el que se destaca también la intervención del personal de Vigilancia Aduanera en la lucha contra el tráfico de drogas.

Más de un 75%. Aunque la marihuana, el hachís y el cannabis siguen ocupando los primeros puestos del ranking en incautaciones, hubo menos en 2020. Por contra, la cocaína experimentó una gran subida. Se sitúa en el cuarto puesto de la relación de aprehensiones con un incremento de más de un 75% en un año. En total, se cogieron 4.439 gramos, lo que representa más de un tercio del total de incautaciones en el conjunto de la región castellano-manchega.

El regreso del 'caballo' empezó a divisarse en el horizonte hace unos años, aunque en la provincia no se haya notado un mayor consumo hasta hace un par de años. En cambio, las incautaciones de heroína anotan una caída del casi 76% en 2020 respecto a 2019 con 130 gramos. El 'rebujito' o 'rebujao', heroína mezclada con base de coca también sigue siendo una droga que se consume en la provincia.

A estas aprehensiones, le sigue de cerca las de metanfetamina que ha experimentado un incremento de nada menos que un 614%, representando el 100% de toda la región de Castilla-La Mancha.

Tras el caballo, aparecen en el listado los hongos alucinógenos con 52 gramos decomisados y plantas adormideras con 50 gramos intervenidos, el 100% de la región. En cuanto, a la sustancia MDA, una variante de MDMA, han sido ocho gramos y seis gramos las metanfetamina polvo o roca.

La Policía Nacional y la Guardia Civil también se han incautado de otros tóxicos como 4.313 unidades de metanfetaminas, 3.052 de anfetaminas, 537 estimulantes y psicotrópicos.

En el caso de las drogas terapéuticas, se han decomisado 49 gramos. A estas sustancias le siguen el polen de cannabis, con 30 gramos intervenidos, así como 25 gramos de hojas de coca y 15 anabolizantes/esteroides. La relación finalizan con otros cocaínicos, cristal, crack y hasta un gramo de burundanga intervenido.

Casi todas las grandes aprehensiones son fruto de un trabajo muy laborioso, que lleva mucho tiempo, horas de trabajo, porque «hay que obtener el mayor número de pruebas» para que el fiscal, primero, y el juez después puedan hacer su trabajo, subrayan a La Tribuna mandos de las Brigadas de Estupefaciente.