El sindicato de enfermería Satse inició ayer en Ciudad Real y en toda España una serie de protestas que buscan llamar la atención sobre el personal sanitario y el esfuerzo que ha realizado durante los dos años de pandemia, sin que hasta el momento haya habido mejoras laborales ni se hayan atendido ninguna de las demandas que se venían solicitando desde antes de que llegara el coronavirus. Tras dos años de COVID salen a la calle, primero en los centros de salud y después en los hospitales, para volver a pedir antiguas reclamaciones como la prescripción enfermera o que solo haya un grupo A en la sanidad, ya que la enfermería se ubica en el grupo A2, "lo que impide desarrollarse profesionalmente y optar a puestos de dirección y de gerencia".
La secretaria provincial de Satse Ciudad Real, Sara Oropesa, señaló que el sindicato se moviliza en todos los centros de salud de España con el objetivo de "movilizar a las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas para hacer visible la lamentable situación que estamos viviendo desde hace mucho tiempo y que se ha agravado con la pandemia del coronavirus". Oropesa, ante casi un centenar de personal sanitario y estudiantes en las puertas de Pío XIII, ha reclamado "unas plantillas adecuadas y desbloquear la ley de seguridad del paciente". Igualmente, se ha sumado la petición, iniciada durante la pandemia, de que haya opciones a una jubilación anticipada sin penalización para profesionales de la Enfermería y la Fisioterapia.
Como reivindicaciones históricas se entienden algunas de la Primaria como que todos los profesionales "vayan uniformados para los cuidados en la calle, ya que es necesario hacer cuidados domiciliarios en su casa", que haya sustituciones plenas o la figura de "la enfermera saliente tras una guardia". La intención es que los trabajadores tres 24 horas, "tengan su descanso".
Oropesa ha recordado que los profesionales sanitarios merecen ese "descanso" tras los dos años de pandemia y sobre todo tras los últimos meses, con Ómicron, que ha supuesto un incremento en la demanda asistencial. El objetivo es tener "unas condiciones dignas" tras estos años de atención, vacunación y cuidados. Desde Satse recordaron que las primeras olas se centraron en los hospitales y las UCIs y esta sexta llegó a la atención primaria donde han tenido que compaginar la atención sanitaria de un periodo normal, con las bajas, el aumento de casos, las vacunas y la atención de los pacientes COVID, en el caso de los fisioterapeutas, que venían de los incrementos de casos anteriores. "Ha sido muy dura en la atención primaria".
Desde Satse apuntaron que la pandemia ha agravado una situación que se venía arrastrando porque ha aumentado el número de profesionales, pero "con contratos temporales". "Esos profesionales deberán estar en plantilla y no tener una temporalidad en el empleo para poder conciliar la vida laboral y familiar". Al final los profesionales van compaginando contratos de "tres o seis meses" que dificultan poder conciliar su vida con el empleo.