La Fiscalía Provincial de Ciudad Real ha pedido la prórroga en la causa abierta por el crimen de una mujer de Villarrubia de los Ojos hace justo un año. Según ha podido saber La Tribuna, se ha solicitado la prórroga porque "faltan algunas pruebas periciales acordadas y testificales relevantes". 

El fiscal jefe, Luis Huete, ha indicado a este diario que el próximo enero esperan que estén completadas las actuaciones para poder transformar el procedimiento en sumario por la Ley del Jurado y proceder a la calificación de los hechos. 

María Dolores Gozas tenía 50 años, una hija de 21 años y un hijo de 14, cuando su pareja acabó con su vida la tarde del 27 de diciembre de 2020 en su casa de Villarrubia de los Ojos, donde se encontraba el menor. 

José Manuel Illescas, de 46 años, le asestó presuntamente una puñalada mortal en el cuello y después huyó de la vivienda. Unas horas más tarde fue detenido en Villarta de San Juan. Desde entonces está en prisión provisional acusado de la muerte de María Dolores Gozas. Fuentes próximas a la investigación han indicado a este diario que tras ser detenido declaró que no recordaba nada y que estaba bajo los efectos del alcohol.

Imagen de archivo del coche fúnebre en la puerta de la casa de Dolores donde fue asesinada hace un año - Foto: LTAunque no hay denuncias, la hija y otros testigos aseguran que María Dolores Gozas era víctima de malos tratos a diario en su casa de Villarrubia de los Ojos por parte del presunto autor del crimen. 

Según avanzó La Tribuna hace unos meses, la familia se ha personado en la causa. El abogado Miguel López, que ejerce la acusación particular, califica los hechos de asesinato. 

La madre y los hijos de la víctima van a pedir la máxima condena por asesinato y la prisión permanente revisable para el acusado.

Familiares y amigos de la víctima rotos de dolor por su muerte - Foto: Rueda VillaverdeMaría Dolores Gozas "era una buena persona, que había sufrido mucho en la vida», ha reiterado a este diario el letrado Miguel López tras subrayar que tenía una hija de 21 años y de un chico de 14, que cuando ocurrieron los hechos estaba en la casa familiar de Villarrubia propiedad de su madre.

Aunque no constan denuncias previas por violencia machista por parte de la víctima, José Manuel Illescas sí tenía antecedentes y orden de alejamiento respecto a sus tres hijos fruto de una relación anterior por violencia en el ámbito familiar.

Dolores no le había denunciando, pero sí fue víctima de un maltrato continúo e insultos por parte del presunto homicida, según han declarado personas cercanas a la víctima, la tercera mujer de la provincia de Ciudad Real que murió a manos de su pareja en 2020 y la 43 de España.