«Pedimos 10 días más». Es el margen que solicitó ayer el Ejecutivo autonómico para seguir reduciendo la tasa de contagios en Castilla-La Mancha. El Gobierno prorroga así 10 días más el nivel de restricciones de nivel 3 «avanzado» que ya aprobó el pasado 18 de enero, y que incluye entre otras medidas el cierre perimetral de los municipios, de manera que no se podrá salir del lugar de residencia más que para trabajar, estudiar, o por cuestiones de causa mayor como ir al médico y siempre con un documento que así lo acredite, el cierre de la hostelería y de establecimientos no esenciales con más de 300 metros cuadrados de superficie, o el toque de queda a partir de las diez de la noche.
El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, informó hoy de esta decisión adoptada en el Consejo de Gobierno que se celebró con carácter extraordinario, y tras el que solicitó esos diez días más porque «los datos nos lo dicen». «Sabemos lo que estamos pidiendo» pronunció, consciente de la exigencia de las medidas para una población y unos sectores económicos al límite. «Sabemos lo que estamos pidiendo y la responsabilidad que eso exige» ahondó, «pero no podemos bajar la guardia» aseguró en un momento en el que los datos que manejan en el Ejecutivo apuntan a que se podría estar en el pico de esta tercera ola, y con «una tendencia a la estabilización» de las cifras.
Apoyado en datos
Fernández explicó que, aunque el número de contagios sigue subiendo, el índice de reproducción del virus, lo que cada persona puede contagiar, ya está por debajo de 1 en Castilla-La Mancha –es de 1,01–, en el 0,95, lo que hace pensar en esa estabilización, «que no bajada» matizó, por lo que insiste en que los niveles siguen siendo preocupantes con más de 1.000 contagios por cada 100.000 habitantes, ocupando el sexto puesto en conjunto del país.
El consejero también se refirió a la capacidad asistencial que mantiene la comunidad autónoma, con 1.573 personas en camas hospitalarias, algo menos que el día anterior, y en las UCI también hay una estabilización al registrar 232 pacientes con Covid, uno menos que el día anterior. Otro aspecto esperanzador es que en las camas de los hospitales de la región existen en este momento más pacientes no Covid –más de 2.000–, que con Covid. «Es importante que mantengamos la actividad para las personas enfermas que no son de Covid» resaltó Fernández, recordando que durante la primera ola «eso fue muy difícil».
Es por eso que no dudó en solicitar, reiteradamente, la máxima prudencia y responsabilidad ante los días que vienen, y mantenerse en la medida de lo posible en casa con la movilidad limitada estrictamente a lo imprescindible.
El consejero se refirió también a la penetración en la región de la conocida como ‘cepa británica’ del virus, de la que hasta el miércoles se tenían contabilizados ya 18 casos, –3 en Ciudad Real y el resto en Toledo–, de los 250 que se tienen constancia a nivel nacional, por lo que se mantiene en una secuanciación «baja» dijo el consejero, en línea con la apreciación que ya realizó en este sentido el Ministerio de Sanidad a nivel nacional.