Maralba, un viaje de mil sabores con vino

M. E.
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El chef, Fran Martínez, y su mujer y sumiller, Cristina Díaz, ofrecen los mejores maridajes con una gran carta con 660 referencias

El chef Fran Martínez. - Foto: Maralba

El restaurante Maralba de Almansa (Albacete) es otra de las grandes referencias gastronómicas de Castilla-La Mancha. Sus dos estrellas Michelin fueron renovadas recientemente por la prestigiosa guía, reconociendo así el gran trabajo y la constancia del chef Fran Martínez y de su mujer, Cristina Díaz, sumiller y jefa de sala. Los dos, junto a su equipo, ofrecen una propuesta singular sobre la cocina manchega, llena de sabor y personalidad. Después de unos primeros años muy duros, con el local prácticamente vacío, ahora los clientes llenan sus salas todos los días y su lista de espera en fin de semana es extensa.

Fran Martínez, uno de los siete embajadores del sello regional Raíz Culinaria, sabe que los manjares que prepara en su templo culinario no serían tal sin el perfecto complemento de una buena copa de vino. Personalmente, se muestra como un apasionado de los vinos con personalidad, de los que no pasan desapercibidos y que dejan un recuerdo imborrable en el paladar. «El acompañamiento del vino es fundamental. Nuestro menú degustación con unos buenos vinos es un viaje de sabores por toda Castilla-La Mancha y, más en concreto, por el entorno de Almansa. Dentro de los maridajes, hay un abanico enorme de pequeños productores, de vinos ecológicos, que son un disfrute cuando acompañan a nuestros platos», afirma el chef de Maralba, que apuesta, en su caso particular, por vinos «superpersonales y supernaturales, que sean diferentes, que te descuadren, que te reseteen la cabeza».

Maralba tiene 660 referencias en su carta de vinos, de las que más de un centenar proceden de alguna de las bodegas de Castilla-La Mancha. Las botellas reposan en una bodega que está a la vista, en el mismo comedor, y que pueden contemplar y admirar sus clientes. La 'llave' de esta gran bodega la tiene Cristina Díaz, que junto a su marido estudian y eligen el mejor complemento para sus platos. La sumiller de Maralba acepta el reto de La Tribuna y lanza dos sugerencias a sus lectores: un tinto, Camino el Ángel, de Bodegas Ampelos; y un blanco, Sopla Levante, de Rodríguez de Vera, ambos de Almansa.

Este martes estará en Fenavin, una feria que nunca se pierde «porque es un gran escaparate para ver muchas bodegas y poder descubrir nuevos proyectos, e incluso probar cosas que llevas tiempo sin probar de bodegas ya conocidas». Describe esta feria como «una sala enorme, tanto conceptos de vino, como zonas, como tipos de vino».