Era su quinta tentativa, pero este año tampoco será. El Almagro FSF se despedía de su anhelo de ascender a la máxima categoría del fútbol sala femenino español tras caer eliminado en la segunda de las tres rondas que tenía por delante para alcanzar este ambicioso objetivo. En un partido tremendamente disputado, el Atlético Torcal hacía bueno el factor pista y se imponía por 3-2 a las ciudadrealeñas, arruinando las esperanzas del equipo encajero y de su afición, especialmente de los seguidores y familiares desplazados hasta tierras malagueñas.

Una eliminación que dolió a su técnico, Pedro Madrid, pero que no le impidió sentirse "muy orgulloso" de sus jugadoras. "Cuando das todo lo que tienes, nadie puede reprocharte nada", sentencia el técnico, satisfecho de su equipo, que fue capaz de "competir bien" ante un rival de entidad y en un pabellón con el ambiente en contra.

En su análisis del partido, Madrid reconoce que el Atlético Torcal llevó la iniciativa desde el primer momento, pero que eso no impidió al Almagro hacer su partido, igualando hasta dos veces el marcador gracias a los goles de Vicky y María, aunque ya no pudo hacer lo mismo con el 3-2. El entrenador ciudadrealeño recuerda que su equipo tuvo que jugar muchos minutos de ambos periodos con la amenaza del doble penalti tras ser sancionado con cinco faltas, después de un arbitraje "un poco casero". Además, al final del partido pasó factura el desgaste físico dada la escasa rotación de las almagreñas, con solo siete jugadoras disponibles después de la obligada baja de Elena Acevedo.

Ya con el Almagro FSF descartado, la final por una plaza de ascenso la jugarán el Atlético Torcal y el Chiloeches de Guadalajara, que eliminaba en su cruce al Penya Esplugues por un rotundo 4-0.