Nuevo permiso para buscar cobalto en el Campo de Calatrava

A. Criado
-

La compañía QBIS Resources ha recibido un nuevo permiso de investigación para intentar localizar cobalto y otros minerales en la comarca del Campo de Calatrava. El proyecto, denominado 'Quebrantahuesos', se extiende por más de 4.500 hectáreas

Nuevo permiso para buscar cobalto en el Campo de Calatrava

La compañía QBIS Resources, de capital australiano, ha recibido un nuevo permiso de investigación para intentar localizar cobalto y otros minerales en la comarca del Campo de Calatrava. Desarrollo Sostenible considera que el proyecto presentado no necesita someterse a una evaluación de impacto ambiental ordinaria por estimarse que no tiene efectos significativos en el medio ambiente, siempre que se cumplan las medidas ambientales y de seguimiento que figuran en la documentación presentada por el promotor.

El permiso de investigación, denominado ‘Quebrantahuesos’, se divide en 153 cuadrículas mineras que ocupan una superficie aproximada de 4.564 hectáreas, distribuidas en los términos municipales de Ballesteros de Calatrava, Cañada, Caracuel, Ciudad Real, Corral y Villar del Pozo. Se suma a dos proyectos más, ‘Zampullín’ y ‘Somormujo’, que recibieron el visto bueno ambiental de la Junta de Comunidades el pasado mes de febrero.

Aparte de cobalto, QBIS Resources intentará localizar manganeso, níquel, cobre y otros minerales en Almagro, Carrión, Miguelturra, Pozuelo, Torralba, Aldea del Rey, Granátula y Valenzuela. El objetivo, tal y como trasladó a La Tribuna el gerente de QBIS Resources en España, César Ayllón, es realizar una campaña sistemática de evaluación de los recursos existentes de los citados minerales «partiendo de la información que ya hay de la zona».

Ayllón explicó que el cobalto está catalogado como ‘materia prima estratégica’ (CRM) por parte de la Unión Europea dentro de un listado de 27 materiales cuyo suministro puede no estar garantizado a medio plazo, por lo que los países miembros «están obligados a facilitar y acelerar todos los trámites» de este tipo de proyectos. Se trata de materias primas críticas muy importantes de cuyo abastecimiento depende la industria europea para la fabricación de numerosos productos, destacando las baterías de los vehículos eléctricos, componentes de las placas fotovoltaicas, captadores eólicos, iluminación eficiente, así como otros materiales, herramientas y equipos relacionados con el progreso tecnológico (instrumental médico, dispositivos móviles, portátiles...).

Desde el Gobierno regional precisan que el hecho de que estos permisos de investigación hayan resultado viables a efectos ambientales, no presupone una posterior concesión de explotación minera en el territorio, sino que ésta “deberá concretarse en el correspondiente procedimiento de evaluación de impacto ambiental de cada uno de los proyectos”.