La Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, dependiente de la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, efectuará un total de 830 análisis de muestras tomadas en las 94 estaciones depuradoras de aguas residuales que están en funcionamiento actualmente en la provincia de Ciudad Real. El objetivo prioritario es realizar un diagnóstico de los vertidos de las EDAR en cumplimiento de la Directiva europea de 21 de mayo de 1991 sobre tratamiento de las aguas residuales urbanas.
Entre los trabajos previstos, además de la recopilación, estudio y caracterización de las depuradoras de aguas residuales a controlar y visitar, se encuentran también la realización de informes de situación inicial de las EDAR para determinar el estado de las instalaciones, la recopilación de datos y la determinación óptima de los puntos de muestreo; informes mensuales especificando las tareas realizadas (muestreos, resultados analíticos, incidencias...); e informes anuales en los que se recopilarán los datos obtenidos mes a mes, así como la valoración final de la conformidad de cada una de las plantas.
Para llevar cabo estas labores, la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, que asume las labores de vigilancia, inspección, control y sanción de los vertidos a las redes de colectores generales y estaciones depuradoras de aguas residuales, competencia de la Junta de Comunidades, invertirá más de 1,4 millones de euros para toda la región en 2020, iniciando los trabajos, tras la licitación del servicio, el próximo 2 de febrero. En total, la adjudicataria tomará 3.956 muestras en 423 EDAR de la región.
zonas sensibles. En lo que a la provincia de Ciudad Real se refiere, 216 de las 830 analíticas a realizar están calificadas como «rigurosas», ya que se realizan en zonas denominadas «sensibles», con muestras de depuradoras que dan servicio a núcleos de población de más de 9.999 habitantes. Incluyen la determinación del caudal de entrada a planta, demanda biológica de oxígeno (DBO5), demanda química de oxígeno (DQO), sólidos en suspensión y el fósforo y nitrógeno totales. Todos estos parámetros tanto en la entrada como en la salida de la planta.
Las muestras se recogerán inmediatamente antes de cualquier alivio previo a la estación depuradora, con el fin de garantizar la medición real de los caudales de vertido generados independientemente de los que sean tratados efectivamente en la planta. También a la salida de ésta, en la fuente de presentación si la hubiese, tomando la muestra de la superficie con el objeto de no recoger sedimentos que pudiese haber en el fondo o en el punto de vertido o pozo de registro previo.
Con el objeto de aumentar la representatividad de las muestras tomadas, en las plantas donde se realicen 24 analíticas al año se deberán tomar tres muestras anuales en sábados y festivos; en las depuradoras donde se realicen 12 analíticas al año, dos se tomarán en sábados y festivos; y en aquellas EDAR en las que se tomen cuatro muestras, deberán ser en días laborables. Siempre que sea posible, las muestras serán tomadas sin previo aviso.
ruidera. Un total de 35 de las 94 depuradoras se hallan en «zonas de vertido sensible», entre las que se encuentran aquellas próximas, por ejemplo, a los ríos Guadiana y Bullaque, a los humedales de La Mancha y el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel. Se remarca también con un asterisco la de Ruidera, en pleno parque natural. Hay que recordar que el Ministerio para la Transición Ecológica desbloqueó en agosto de 2018 el proyecto de saneamiento de las Lagunas con una resolución de la Dirección General de Biodiversidad y Calidad Ambiental por la que se formuló su Declaración de Impacto Ambiental favorable. Con esta actuación, que incluye acciones complementarias para la adecuación del filtro verde, se pretende que el vertido de aguas residuales a las lagunas sea cero.