Las estaciones de servicio de Castilla-La Mancha descartan movilizaciones o cierres, al menos durante esta semana. En la reunión mantenida ayer en Toledo por la Federación regional de Empresarios de Estaciones de Servicio (Fecamaes), se constató que ya se están empezando a recibir los anticipos prometidos por el Gobierno para que estos establecimientos puedan aplicar el descuento aprobado de 20 céntimos por litro de combustible suministrado, sin tener que adelantar ese coste de sus arcas. Por ello, el colectivo decidía mantener ese voto de confianza durante toda esta semana, para analizar el viernes, en una nueva reunión, si esos pagos se generalizan a todos los miembros del sector.
Pese a todo, los empresarios de estaciones de servicio siguen estando «molestos y nerviosos» y no descartan movilizaciones y cierres de sus establecimientos a las puertas de las vacaciones de Semana Santa, como confirmaba a este periódico el presidente de los asociados de la provincia de Ciudad Real, Francisco Molina, que pone en «seria duda» que este compromiso de pago lo pueda cumplir el Gobierno durante los tres meses de duración de esta medida especial aprobada la semana pasada por Real Decreto. «Ahora se están dando prisa en pagar para calmarnos y taparnos las bocas antes de Semana Santa, pero el problema llegará cuando haya que liquidar el mes de abril», opina Molina.
tres propuestas. En esta junta regional de Fecamaes se acordaba elevar a la confederación nacional del sector (CEEES) tres propuestas, que a su vez debería trasladar al propio Ministerio para la Transición Ecológica: aplazar el IVA de la liquidación de estos tres meses de campaña; seguir con los anticipos también para los meses de mayo y junio, y realizar una liquidación total al tercer mes; y solicitar a la Junta de Castilla-La Mancha que ponga a disposición del sector créditos al 0% de interés durante cuatro años, «como ya han hecho en comunidades como la valenciana o Baleares, lo que demuestra que sí es posible», apuntaba Molina.
El representante de los empresarios de estaciones de servicio de Ciudad Real insiste en que el Real Decreto aprobado en el 'plan Sánchez' para combatir la crisis energética agravada por la invasión rusa de Ucrania «se podía haber hecho mejor y aún se puede modificar, porque no tiene sentido que seamos nosotros los que costeemos ese descuento para el ciudadano -calcula que entre 1.000 y 2.000 euros al día por gasolinera-. El Gobierno debe tomar nota». Aun así, da de margen hasta el viernes y con el deseo de que «todo se arregle durante estos días», sin descartar tomar medidas en plena campaña de Semana Santa, en la que se producirán miles de desplazamientos por carretera. En este sentido, Molina no cree que un posible cierre de las gasolineras asociadas pueda tener el efecto de presión buscado, ya que otras estaciones de servicio, propiedad de las grandes petroleras, sí funcionarían: «Si cerramos nosotros y abre la gasolinera de al lado, haremos el tonto y además correremos el riesgo de perder al cliente».