El Balonmano Alarcos quedó eliminado de la Copa del Rey al perder en el Quijote Arena por 26-32 ante el Atlético Valladolid de Liga Asobal. Un partido en el que "luchamos hasta el final", aseguró el técnico alarquista, Isidre Pérez, que lamentó el flojo inicio de los suyos. "Nos costó entrar al encuentro, cometimos muchas imprecisiones y estuvimos nerviosos. Tuvimos demasiado respeto al rival, no tuvimos ese desparpajo y ellos nos lo penalizaron".

En cualquier caso, el preparador alicantino dejó claro que "no puedo reprochar nada a mi equipo. Detalle como que Valladolid tuviera que jugar siete contra seis contra un conjunto de Plata y volver a poner sobre la pista a Borja Méndez, que es un jugadorazo, dignifica el trabajo de mis jugadores".

Entre lo positivo subrayó que no hubiera lesionados. "Veníamos de un partido durísimo contra Sagunto, y éste era un encuentro muy intenso también. Visto lo que nos estaba pasando esta temporada, acabar sin lesionados es muy positivo. Y lo negativo fue la eliminación porque queríamos competirlo y lucharlo. Estoy fastidiado por la eliminación y deseo suerte al Valladolid, que es un auténtico equipazo".

Pérez dejó claro que Urios no jugó para concederle descanso y que Dídac Talens jugó con problemas gástricos. En este sentido, aseguró que "mi equipo juega cada vez más colectivamente, seguimos creciendo. Hemos competido a grandes plantillas y grandes conjuntos. Es verdad que seguimos cometiendo imprecisiones, fallamos lanzamientos claros, pero es que estamos en noviembre y somos muchos nuevos. Lo importante es el carácter luchador y competitivo de este equipo, la educación deportiva y lo unidos que están los chicos, de eso me siento muy orgulloso".