El pasado 2022 fue el año de la licitación de obra pública en la provincia. Carreteras, infraestructuras sanitarias, administrativas, asfaltados… El sector público movilizó 187,8 millones de euros en licitaciones tanto de edificación como de obra civil en Ciudad Real. Son casi cinco veces más de las partidas que se suelen dedicar a estas actuaciones en la provincia en la última década. En ese periodo, solo una vez se superó el esfuerzo inversor anunciado por el Estado, la Junta y la administración local en 2022. Fue el año anterior, el 2021.
La apertura de un ciclo electoral, faltan ya menos de 100 días para elegir alcaldes y presidentes regionales y, en el horizonte, antes de fin de año, al inquilino de La Moncloa, calienta siempre los anuncios de licitaciones, que también se vieron beneficiadas por el manguerazo de euros llegados desde Europa para compensar el frenazo económico que dejó la pandemia del coronavirus.
El presidente de los empresarios de la construcción, Manuel Carmona, inciden en esos factores que califican como «fundamentales». Por una parte, las elecciones, «que hacen que los datos de licitación siempre sean superiores a los de años anteriores». Por otra, esos «proyectos que tienen que ver con fondos europeos». «No hay que olvidar que si comparamos los datos de 2022 con los últimos años, la diferencia es aún mayor, teniendo en cuenta que los años prepandemia no fueron excesivamente potentes en volumen de licitación y que en 2020, prácticamente, estuvo paralizada la inversión pública en obras».
Los fondos europeos y las elecciones sostienen la obra públicaUna clave de esta inversión es que «redunda en las empresas de la provincia», eso sí, «distinguiendo por tamaño de obra y tamaño de empresa». «No todas las empresas pueden aspirar a todas las obras, sobre todo de gran volumen, pero en nuestra provincia hay un gran nivel de empresas contratistas que pueden aspirar a grandes contratos, y así se está demostrando, pues ejecutan importantes obras». Carmona señaló, además, que «hay un gran nicho de obras pequeñas, normalmente de ámbito municipal, que suelen ejecutarse por empresas de la zona de menor tamaño». Eso sí, recordó que a las licitaciones pueden optar empresas de cualquier parte de Europa, pero, «debido a la preparación y profesionalidad de las nuestras», una gran parte de las obras se ejecutan por empresas de la provincia. De hecho, apuntó que hay «obras que han sido empezadas por empresas de otro territorio y se ejecutan con problemas» y que acaban compañías provinciales.
Sobre el futuro, Carmona señaló que hay «incertidumbre» en el sector, como en toda la economía, por la subida de precios, la inflación y los tipos de interés. Con todo, la construcción tiene como fortaleza que ya ha vivido «una crisis de grandes dimensiones en la década pasada» y, ahora mismo, «hay un buen volumen de actividad, más profesionalización» y se abre la posibilidad de trabajar también en la rehabilitación, la eficiencia energética o la sostenibilidad, sectores relevantes para los próximos años.
Echando la vista a 2022, la provincia notó un bajón con respecto a la inversión pública de 2021, pero es que ese fue un año histórico. Desde 2010 no llegaba tanto dinero público para proyectos en Ciudad Real.
Los que tiraron del carro de la inversión pública en el último ejercicio fueron las administraciones locales. Ayuntamientos y Diputación pusieron sobre la mesa proyectos que implicaron movilizar casi 100 millones de euros. Una cantidad récord. También anotó una importante subida de sus fondos para licitar la Junta. Más de 55 millones de euros gracias a proyectos como la nueva Ciudad Administrativa de la capital. Es más del doble de los euros que se suelen repartir en la provincia en la última década, en la que destaca también 2021. Entonces apareció en las cuentas la licitación del hospital de Puertollano. El más 'contenido', el Ejecutivo central: 32,6 millones, también por encima de lo que el Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos ha dedicado a Ciudad Real desde mediados de 2018.