Agosto no ha sido un buen mes para el sector de la automoción de la provincia. La matriculación de vehículos, lejos de ir al alza como ha ocurrido a nivel nacional, ha experimentado una nueva caída, que en este caso rozó el 11 por ciento. Así lo ponen de relieve los datos de la patronal del sector, que evidencian que durante el mes que acaba de decir adiós se formalizaron 251 operaciones de compraventa de vehículos nuevos, frente a los 282 del mismo mes del año anterior.

De este modo, la tendencia a la baja se agudiza y el sector acumula ya en la provincia un descenso de sus ventas del 12,76 por ciento en lo que va de año. La incertidumbre económica, el incremento del precio de los combustibles o la inflación han echado el freno a las operaciones en los concesionarios.

Las cifras son las siguientes: de enero a agosto de este año se han matriculado 2.332 vehículos, mientras que en el mismo periodo de hace año, a pesar de que la economía se desperezaba entonces lentamente de la pandemia, se comercializaron 2.673.

Las que más se han apretado el cinturón en estos tiempos de crisis de suministros y encarecimiento de los materiales han sido las empresas: su matriculación de vehículos se ha reducido en un 17,29 por ciento, aunque también las familias han optado por aparcar el proyecto de comprarse un coche nuevo y su matriculación ha disminuido en un 12,44 por ciento.

Por tipo de vehículos, el diésel es el que ha experimentado el mayor desplome: se ha vendido hasta agosto un 35,3 por ciento menos, aunque tampoco la gasolina se ha librado de esta senda descendente y su matriculación se ha reducido un 20,9 por ciento en lo que va de año. Los únicos que van 'enchufados' en esto de las ventas son los híbridos y eléctricos, que van al alza con un 19,6 por ciento más de matriculaciones hasta agosto.

Para la patronal del sector, la lectura está clara: «El sector continúa acusando la crisis de los microchip, agravado por el complicado escenario geopolítico internacional», afirmó Félix García, director de Comunicación y Marketing de Anfac. «La crisis que está viviendo el sector de la automoción no tiene precedentes», agregó Raúl Morales, director de Comunicación de Faconauto tras señalar no obstante que la leve mejoría registrada a nivel nacional no mitiga el «raquítico y deprimido» mercado de la automoción. «No podemos lanzar las campanas al vuelo porque el volumen sigue más de un 30% por debajo de prepandemia», indicó Tania Puche, de Ganvam.