Las demandas de disolución o divorcios de matrimonios ciudadrealeños rozaron el millar el pasado año, según dio a conocer ayer el Consejo General del Poder Judicial, que apunta al último trimestre del año como el de mayor número de rupturas, con una de cada tres acumuladas en todo el año. Si en todo 2020 se presentaron 991 demandas de divorcio y separación, 321 se concentraron entre los meses de octubre y diciembre.

Por partidos judiciales, el que incluye a la capital es el que más demandas de este tipo presentó, en total 223, mientras que en la zona de Almadén se presentaron solo 19 peticiones para dar por acabado un matrimonio.

El divorcio es la fórmula más repetida para la separación de una pareja, con 938 peticiones frente a las apenas 53 demandas de separaciones. La primera implica poner fin al matrimonio, la segunda, el cese de la convivencia de los cónyuges.

En el recuento de casos que realiza el Consejo General del Poder Judicial hubo más peticiones de divorcios en las que se llegó a un acuerdo previo entre las parejas (501) que los que no (437). Ese consenso, sin embargo, salta por los aires al entrar en disputa la guardia custodia de los hijos. En 138 casos hubo un acuerdo entre los cónyuges y en 345 no. Además, la modificación de las medidas que hubieran acordado los cónyuges o el juez tras un proceso de divorcio o separación matrimonial también son mayoritarias las que llegan sin acuerdo (279) que las consensuadas (115).

En el conjunto del país, la estadística judicial anotó un descenso del número de divorcios y separaciones en España durante la pandemia, algo que también pasó en el conjunto de la región. Las 3.964 demandas de disolución matrimonial -es decir, demandas de separación o de divorcio, tanto de mutuo acuerdo como no consensuadas- presentadas en los juzgados de la región en el año pasado supusieron una disminución del 14,6% respecto a las registradas en 2019.