El Hiros Caserío, que esta campaña debutará en la División de Honor Plata, estuvo muy cerca de dar la sorpresa en la semifinal del Trofeo Junta ante un rival de Liga Asobal como el Guadalajara (25-26). Era el tercer partido en cinco días para el conjunto que entrena Santi Urdiales, que a pesar de la notable imagen mostrada recuerda que es pretemporada y que el objetivo era «evitar lesiones». 

Con casi tantas sesiones de entrenamiento acumuladas como encuentros, el técnico santanderino no oculta su preocupación, pues «a la acumulación de partidos hay que sumar la carga física de los entrenamientos y es un poco peligroso para los jugadores. Competimos bien, pero tampoco habíamos preparado muchas cosas y ellos tenían bajas, así que no saco demasiadas conclusiones», analiza.

El carrusel de encuentros continúa este sábado con la disputa de las semifinales de la Copa Diputación ante el Bolaños. «A partir de ahí podremos entrenar más porque el único objetivo es llegar de la mejor forma posible al inicio de Liga», el 18 de septiembre en Ciudad Real ante el Alarcos.

A partir del domingo el preparador del conjunto ciudadrealeño confía en disponer ya del portero Santiago Giovanola, una vez solucionadas todas las cuestiones burocráticas que le han impedido desplazarse antes a Ciudad Real.