La semana pasada fue el final oficial de la tercera ola. Más allá de la desescalada iniciada por el Gobierno regional, ese final lo atestigua el informe semanal que publica el Ministerio de Sanidad y que saca a Ciudad Real del nivel extremo, el máximo que existe, para situar directamente la provincia en el nivel medio. Se trata de una caída fruto del descenso de casos a 14 y 7 días, pero también a la bajada en la ocupación de las camas hospitalarias, las de UCI, la trazabilidad de los casos y la mejora en la cifra de los mayores de 65 años, todos los parámetros que tiene en cuenta el Ministerio para elaborar el documento. Se trata de la primera vez en este 2021 en que la provincia sale del riesgo extremo.  Además de Ciudad Real, Albacete y Cuenca se encuentra en riesgo medio, Toledo en alto y Guadalajara se queda como la única situada en riesgo extremo.

Las cifras en concreto sitúan tres parámetros de contagios en el riesgo medio y uno en el extremo. Los primeros son la incidencia acumulada a 14 días para la población general, 126,1 casos por cada 100.000 habitantes, y a siete días, 39,5; así como la incidencia a siete días entre los mayores de 65 años, situada en 27,8. Hace una semana las cifras eran más del doble, con por ejemplo, una incidencia acumulada de 292,1 casos por cada 100.000 habitantes. El parámetro en riesgo alto es la incidencia de mayores a 14 días, con 115,1 casos por cada 100.000 habitantes.

Por otra parte, en una situación de riesgo bajo se encuentra la situación por la vigilancia de los nuevos casos. En concreto hay una tasa de positividad muy baja, solo un 4,6 por ciento de las pruebas son positivas. Esto indica que apenas deberían quedar casos sin detectar, ya que se está haciendo tal cantidad de pruebas en que en más de nueve de cada diez son negativos. Mientras, como en el 79,6 por ciento de los casos positivos detectados se sabe de dónde viene el contagio, existe mucha trazabilidad. En este aspecto, hay que tener en cuenta que se trata del dato más bajo del año, perdiendo Ciudad Real su liderazgo en España.

Por último, los peores datos ocurren en la saturación hospitalaria, con un 5,5 por ciento de camas ocupadas y un 33,3 por ciento de camas de UCI. Un descenso en esta ocupación es lo que faltaría para salir del riesgo medio y situarse en el riesgo bajo.