En la última semana de enero se ha autorizado el trasvase correspondiente a este mes. Hoy se ha reunido la Comisión de Explotación del Tajo-Segura que pidió 20 hectómetros cúbicos, el máximo que se puede solicitar estando los embalses en nivel 3 de situación hidrológica excepcional. El Ministerio para la Transición Ecológica rebajó esas peticiones en tres hectómetros cúbicos y al final ha aprobado un trasvase para enero de 17 hectómetros, de los cuales 7,5 hectómetros cúbicos se destinarán a abastecimientos urbanos y 9,5 para regadío.
Esta estrategia la viene siguiendo el Ministerio desde el otoño. La Comisión pide el máximo de 20 hectómetros cúbicos, pero en octubre y noviembre lo dejó en 13 hectómetros cúbicos y en diciembre en 17, igual que en este mes de enero.
El caso es que esta rebaja de tres hectómetros cúbicos puede parecer escasa si se ven los argumentos esgrimidos. En el lado de la cuenca del Tajo el informe técnico calculaba a 1 de enero que durante todo el trimestre los embalses de cabecera seguirán en situación hidrológica excepcional. En cambio, en la cuenca del Segura la lluvia media de los últimos doce meses ha sido de 372 litros por metro cuadrado, valor superior a la media anual de 354. Se le añade que en el Segura todavía tienen embalsados 47,6 hectómetros cúbicos de anteriores trasvases para usar en abastecimiento y regadío.
A todo esto, esa agua autorizada no se va a poder trasvasar en estos momentos. Desde septiembre el acueducto está cerrado mientras se realizan las obras que se están realizando en el embalse de La Bujeda para reparar las fugas que se detectaron en abril. La borrasca Filomena supondrá un retraso en la terminación de las obras de reparación, que se ha estimado en unas tres semanas. En estos momentos hay pendientes de trasvasar 60 hectómetros cúbicos, correspondientes a los meses de octubre, noviembre, diciembre y enero.