El rey de Illumbre

María Albilla (SPC)
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El escritor vasco Mikel Santiago cierra con 'Entre los muertos' la trilogía ambientada en el pueblo imaginario que ideó para'El mentiroso' y en el que esta vez hace crecer al personaje de la agente Nerea Arruti

El rey de Illumbre

El verano es tiempo de viajar y de leer y quien pueda hacer las dos cosas, se puede sentir afortunado. De hecho, son muchos los autores que han popularizado casi sin querer rutas por ciudades, valles o islas en las que sus lectores se adentran para respirar los escenarios por los que transitan ya sea con pena o con gloria los personajes de ficción.

A veces se pueden recorrer hasta espacios imaginarios. Es la magia de la literatura... y de paisajes como los de la costa de Vizcaya, donde el escritor Mikel Santiago creó Illumbe, un pueblo imaginario que discurre entre los acantilados, el mar y la montaña, que bien podría recordar a Mundaka, por cuyas calles el autor pasea habitualmente con una imaginación desbordante que le ha llevado a firmar una exitosa trilogía que, tras los éxitos de El mentiroso y En plena noche, ha cerrado esta primavera con Entre los muertos (Ediciones B), el «tiro de gracia» de la serie, apunta el autor. Aunque Mundaka, Illumbe,... «da para mucho».

Santiago destaca cómo el escenario al que ha dado forma puede ser el continente de mil historias. «Yo no sería capaz de estar escribiendo sobre un mismo personaje una novela detrás de otra», apunta, aunque su particular Macondo es muy evocador y Nerea Arruti tiene mucho que decir...

Ella es la protagonista de esta novela que tiene a Santiago emocionado. Es una policía judicial que ya aparecía como secundaria en su anterior título, pero que en esta entrega coge un impulso que la puede llevar tan lejos como la creatividad de su autor desee. La agente va de menos a más serpenteando por una historia -su historia- intensa y llena de quiebros, de driblajes en la trama con los que el escritor juega y da esquinazo al atrevido lector que crea ir un paso por delante de la trama.

Sociólogo, programador, músico... Mikel Santiago es muchas cosas, pero sobre todo es una persona inquieta con una creatividad desbordante y callo en la literatura, ya que esta es la séptima novela de una trayectoria que se inició en un blog y el empuje de sus amigos. «Luego una de mis historias lo petó en Estados Unidos y el mundo editorial, por fin, me abrió sus puertas», cuenta. Entonces vivía en Ámsterdam y allí trabajaba como programador a media jornada. El resto del tiempo lo dedicó a escribir y en dos años tenía La última noche en Tremore Beach, la obra que le confirmó en el mundo editorial y de la que aún no se ha escrito el final. «Ha habido un milagrito y parece que va a salir algo chulo de esto...», comenta con cautela, ya que hace tiempo que la productora de Alejandro Amenábar trabaja para convertirla en un proyecto audiovisual.

También hay planes similares para El mentiroso y La isla de las últimas voces se está moviendo en Estados Unidos e Illumbe también ha despertado distintos intereses. Al final, miles de lectores que han disfrutado de los títulos sobre el papel avalan que puedan ser también un éxito en cualquier plataforma audiovisual.

Un sello personal

Pero ahora es el momento de Nerea. «Es un personaje maravilloso. Si yo fuese mujer querría ser como ella», explica. Su hacedor la ve como una loba solitaria, una inadaptada, una mujer tan inteligente que no entra en determinados juegos de la sociedad. «Ha jugado al amor con Kerman y poco más... Cree que no se merece las cosas y juega a perder», explica. Pero el forense Kerman Sanginés muere y la bofetada que recibe de la realidad hace que todo se tambalee en su vida. Indagar en cómo y por qué ha muerto el hombre del que se ha enamorado y hacerlo como amante, no como policía, supone un viaje que el lector hace con el aliento contenido. Es el sello de Mikel Santiago, un estilo propio que el escritor acepta y saborea porque sabe que, al final, lo importante es sobresalir en las estanterías de las lebrerías para llegar a los máximos lectores posibles. 

«Siento vértigo cada vez que voy a una librería. Es una selva. ¿Cómo vas a sobresalir entre tantos títulos? Tener una marca te ayuda, pero luego hay que jugar. Hay que dar a la gente lo que espera, pero también ir explorando y experimentado lo que a ti te piden las historias como autor», explica.

Santiago experimenta en la literatura y en la vida... Es padre de tres niñas pequeñas, dos de ellas gemelas de 15 meses, lo que ha supuesto una organización milimétrica de las jornadas para ir escribiendo este libro, pero, además, está metido de lleno en un proyecto televisivo del ámbito del true crime, que se estrenará en octubre en la televisión pública vasca.

Mientras este proyecto se materializa, en su cocina ya se van cociendo «las cazuelitas que tengo en el horno», explica enigmático y risueño. No lo dice, pero se intuye que Illumbe le tiene atrapado y que Nerea va a seguir creciendo tras el inesperado e impactante final de Entre los muertos.