Con la Virgen del Prado ante los ojos

D. F
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Las puertas de la Catedral se abrieron con sonido de campanas y cohetes para anunciar que la Patrona está ya en el altar mayor

Con la Virgen del Prado ante los ojos - Foto: Tomás Fernández de Moya

El estruendo de los cohetes y el revuelo de las campanas indicó el momento en el que las puertas de la Catedral se abrieron para que los vecinos de Ciudad Real accedieran a ver a la Virgen del Prado en el altar mayor.

La imagen, vestida con el manto de los condes de la Cañada, se encontraba en el lado de la epístola y a sus pies se fueron depositando ramos de flores, el primero de ellos el que dejó la dulcinea, Fátima de la Flor, a quien acompañaban sus damas de honor y una nutrida representación de la Asociación que las agrupa.

Junto a ellas se encontraba el presidente de la Hermandad de la Virgen del Prado, Francisco Pajarón, mientras que entre los que se acercaron al templo para contemplar durante unos minutos a la Patrona y entablar su particular diálogo con ella, se encontraba la concejala de Festejos, Eva María Masías, y algunas filas más atrás la presidenta de la Federación de Peñas, Frasi López.

De la Flor reconoció que el acto de ayer fue para ella emocionante. «Siempre vengo, pero es verdad que este año es un poquito más especial, puesto que vienes en representación de todas las mujeres manchegas, en especial de las que son de aquí, de Ciudad Real».

Entre los que accedieron en los primeros minutos de la apertura a la Basílica-Catedral se encontraba María del Carmen Lara, ciudadrealeña de nacimiento, «lo que pasa es que llevo 36 años fuera de Ciudad Real», en los que muchas veces no ha podido coincidir con el día de la bajada de la Virgen. «Hace muchísimos años que no venía, porque no coincidía, aunque vengo con mucha frecuencia, porque amo Ciudad Real». En cualquier caso, reconoce haberse sentido «muy bien, ya que pasar a cualquier iglesia, no sólo a esta, me reconforta bastante», apuntó. «Sabía que hoy era el día de la bajada de la Virgen y en cuanto hoy los cohetes y las campanas, vine para aquí», apostilla. Otro de los visitantes de la Virgen en la jornada de ayer, Pedro Jesús Isado, explicó que aunque si es habitual en él acudir a la Catedral durante los días en que la Patrona se encuentra en el altar, «normalmente lo hago cuando ya está la Feria iniciada, a partir del día 15». En cambio ayer, «como estoy en una residencia, me cuesta trabajo venir desde tan lejos, pero he aprovechado que tenía la tarde más libre, para venir».

Por su parte, el presidente de la Hermandad, Francisco Pajarón, comenta que en ese momento en el que se abre la verja de la Catedral, «la gente llega emocionadísima, pensando en ver a la Virgen, porque la tienen más cerca». En este sentido, insistió en que Santa María del Prado «es la madre de todos, la que está en nuestra historia, es la que abrió las puertas para que esta ciudad existiera». Para Pajarón, días como el de ayer son la ocasión para comprobar que el trabajo de su Hermandad todo el año llega.