Trabajadores de Herrera y Alcázar protestan por las agresiones

P. Muñoz/LT
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Se desplazarán mañana a Toledo para sumarse a la protesta convocada por Acaip-UGT y CSIF ante la Delegación del Gobierno por las recientes agresiones de presos a funcionarios de prisiones y las condiciones en que desempeñan su trabajo

Imágenes de archivos de protestas por la falta de medio y reconocimiento de agentes de la autoridad

Trabajadores de prisiones se concentrarán mañana, 14 de julio ante la sede del Gobierno en Toledo en protesta de las últimas agresiones a compañeros. Funcionarios de las cárceles ciudadrealeñas de Herrera de la Mancha y Alcázar se desplazarán a la capital de la región castellano-manchega para sumarse a la concretación, que tendrá lugar entre las 12.00 y 13.00 horas organizada por las secciones sindicales de Acaip-UGT y CSIF de Castilla-La Mancha. 

La protesta se llevará a cabo en las puertas de las delegaciones de Gobierno de todas las autonomías donde hay centros penitenciarios que no tienen transferidas las competencias y dependen de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias. 

Desde septiembre del pasado año, los sindicatos convocantes mantienen un conflicto colectivo con la Administración penitenciaria por la situación de abandono, condiciones laborales, falta de medios y personal e incumplimientos como el reconocimiento de agentes de la autoridad, que frenarían las agresiones que están sufriendo los funcionarios de prisiones.

Imágenes de archivos de protestas por la falta de medio y reconocimiento de agentes de la autoridadImágenes de archivos de protestas por la falta de medio y reconocimiento de agentes de la autoridadSegún informaron ayer los citados sindicatos, las últimas semanas están siendo "especialmente duras" en las prisiones españolas, con una

"sucesión de incidentes de extrema gravedad y que parecen tener un mismo nexo, que es la dejadez de los gestores de la institución, una inadecuada clasificación interior y una política de 'buenismo' que está llevando a que cada vez los ataques que sufren los trabajadores sean más graves".

El 1 de julio un interno atacó a un funcionario de prisiones de Murcia II causándole una grave herida en el cuello, cerca de la yugular, con la tapa de una lata de conservas. Pocos días después, tres funcionarios de Picassent acabaron en el hospital por la agresión de otro reo, en este caso uno de ellos sufrió la rotura de pómulo y mandíbula, viéndose afectado también el ojo. A ello se sumó el ataque en Madrid VII a otro trabajador por parte de un recluso, que le noqueó con golpes en la cabeza.

Según informan Acaip-UGT y CSIF, los últimos incidentes están protagonizados por presos de perfiles inadaptados que tienen un régimen de vida ordinario. "Además, desde las direcciones de los centros se ponen trabas para la aplicación del régimen disciplinario. Todo ello sumado a la endémica falta de personal, la prácticamente nula formación que recibimos los trabajadores y a un, cada vez más alarmante, deterioro de la atención médica penitenciaria con un déficit del 58,25% de médicos".

Así las cosas, dicen que "ha llegado el momento de gritar basta ya. Es necesario que se apruebe la legislación que dote a los trabajadores penitenciarios de autoridad y que estas agresiones sean consideradas atentados a la autoridad y no se salden con meras sanciones administrativas".

Estas organizaciones sindicales tienen declarado un conflicto colectivo con la Administración penitenciaria por la "falta de negociación de las mejoras que necesita la institución: retribución adecuada a las funciones que realizamos y declaración de agentes de autoridad a los trabajadores penitenciarios", entre otras. "No podemos, ni debemos consentir una agresión más", aseveran preparados para la protesta de mañana en Toledo.