os expedientes de tutelas de menores han aumentado en el último año, siendo Ciudad Real la provincia de la región con mayor número de niños y niñas bajo la tutela o guarda de la Junta de Castilla-La Mancha. Según datos de la Fiscalía Provincial de Ciudad Real, se han tramitado 72 expedientes de tutela automática. De este modo, los informes de protección abiertos el último año a menores en situación de riesgo se suman a otros 481. Estos niños y niñas viven en Ciudad Real bajo la tutela o guarda de la Administración regional, un buen número de ellos con familias de acogida y otros tantos en centros residenciales.

En todos los casos la Fiscalía hace un «total seguimiento y supervisión» como garante del interés superior del menor, destaca a La Tribuna la fiscal delegada de Menores Carmen López de la Torre.

En el último año, tres niños fueron dados en adopción y dos en acogimiento familiar. Hay menores en tutela desde la cuna, desde su nacimiento, al renunciar la madre en el parto. Son los casos que entrañan mayor dificultad.

También hay otros en los que un progenitor o progenitora, por circunstancias personales, no puede cuidar de su hijo durante un tiempo porque tiene que estar hospitalizado por enfermedad sin tener más familia. En estos casos excepcionales se solicita la guarda a la administración pública competente, esto es, la delegación de guarda por parte del padre o la madre en éstas u otras circunstancias similares. A estos se suman adolescentes también en situación de abandono y riesgo como pueden ser los menas (menores extranjeros no acompañados).

Este ámbito de protección de la Fiscalía de Menores es desconocido para la gran mayoría de los ciudadanos y la tutela o guarda de menores por parte de la Administración regional generalmente se asocia a malos tratos o abusos en el ámbito familiar. La fiscal delegada de Menores indica que no es así, que hay otros muchos motivos. La casuística de situaciones que llevan a un menor a ser tutelado por la entidad pública es casi inabarcable.

Sea la causa que sea, tras la declaración de desamparo y asunción de tutela, la Fiscalía supervisa todos los ámbitos y esferas de ese menor (salud, educación, desarrollo físico, tramitación de documentación…) a través de informes. La Fiscalía de Menores de Ciudad Real estudia con detenimiento todos los casos que se registran y hace un seguimiento exhaustivo por el interés superior del menor, que pueden dar lugar a una intervención.

La situación del niño o la niña en tutela o guarda puede ser provisional, porque sus familias no pueden hacerse cargo de ellos temporalmente, o llegar a ser en definitiva, hasta que alcance la mayoría de edad. Abundando en esta línea, la fiscal explica que «la extinción de la tutela más común son la reintegración familiar y alcanzar la mayoría de edad».