Entrar en la Historia, así con mayúsculas, tiene múltiples vías y numerosos guardianes, guías y pesquisidores, como es el caso de la Real Academia de la Historia que actualmente dirige Carmen Iglesias. Una de las funciones de esta institución es editar el Diccionario Biográfico, del que hace unos meses se presentó su edición digital. Esta obra incluye 45.000 entradas, de otros tantos españoles dignos de ser recordados por la posteridad desde el siglo VI hasta la actualidad.
En esta obra se puede encontrar las reseñas biográficas de 214 personas nacidas en Ciudad Real, solo cinco de ellas mujeres. Una contribución femenina que además se limita a los siglos XIX y XX. En orden alfabético, esas ciudadrealeñas elegidas son María Antonia Abad, más conocida como Sara Montiel; Aurora Bautista, también una destacada actriz de la segunda mitad del siglo XX; la menos conocida Luisa Alberca, autora de novelas románticas y seriales radiofónicos en la misma época; la escritora mexicana Isabel Prieto de Landázuri, pero nacida en Alcázar de San Juan en el siglo XIX;y religiosa Cándida de San Agustín, fundadora del convento de Agustinas de Valdepeñas.
Por supuesto que hay ausencias. Desde la misma Valdepeñas se podría reclamar una entrada para su heroína Juan Galán La Galana, una de las protagonistas de enfrentamiento del pueblo contra las tropas francesas el 6 de junio de 1808.
La relación de nombres que ofrecen la Real Academia de la Historia abunda en políticos, religiosos, militares y más recientemente escritores, actores, empresarios o ingenieros.
En buena medida, los biógrafos académicos muestran gran interés por identificar la ascendencia familiar de sus biografiados; se incluye el nombre de los padres y si es posible el tipo de actividad económica principal; su etapa de formación, y su evolución profesional.
El expresidente de la Comisión Europea y del Congreso de los Diputados, Manuel Marín, fallecido el pasado año;el general Aguilera; el escritor renacentista Bernardo Balbuena; el militar Hernán Pérez del Pulgar; el gramático Bartolomé Jiménez Patón; o el ingeniero Mónico Sánchez son algunos de los personajes ciudadrealeños de dicha relación.