Ciudadanos ha sido uno de los perdedores de la provincia en las elecciones de este domingo con algo más de 18.000 sufragios y el 6,81% de apoyos. La formación naranja consiguió hace seis meses el primer diputado que rompió el bipartidismo en la provincia de Ciudad Real, donde ha perdido más de 32.000 votos en relación a los comicios de abril. En aquella ocasión dio el sorpaso al Partido Popular en cuatro de las diez localidades más pobladas (Puertollano, Valdepeñas, Manzanares y Miguelturra) pero este domingo la provincia sacó la tarjeta roja al partido, que hasta ayer lideraba Albert Rivera tras dimitir como presidente y abandonar la política, y ha pasado a situarse entre la cuarta y quinta fuerza más votada por detrás de Vox y Unidas Podemos.
Ciudadanos se desploma y la formación liberal queda por detrás de Unidas Podemos en un total de 53 municipios como en Puertollano o en Ciudad Real, donde acordó con el PSOE alternarse dos años las alcaldías. Ciudadanos ha sido el más perjudicado en la capital con una caída de más de la mitad de los votos, pasando de los 9.227 a los 3.421. Los ‘naranjas’ pierden más de 12 puntos en comparación con abril y queda quinto. Situación similar a Valdepeñas, donde pierden 14 puntos de apoyo en seis meses.
Alcázar de San Juan, Bolaños de Calatrava, Manzanares o La Solana fueron algunos de los municipios donde obtuvo más votos en abril, y donde medio año después ha caído también para retroceder a sus orígenes. Los datos tampoco son nada buenos para la formación en Castilla-La Mancha, donde se desploma hasta el quinto partido más votado y pierde los cuatro escaños que logró en abril. Una debacle electoral que reconocen dentro del propio partido. «Los datos son negativos y no podemos estar contentos con los resultados que se han obtenido», comenta el secretario de Organización de Ciudadanos (Cs) Castilla-La Mancha, Alejandro Ruiz, quien resaltó el trabajo de los candidatos. «En la provincia de Ciudad Real hemos trasladado el mismo mensaje con los mismos candidatos y el mismo trabajo y los mismos medios pero en las elecciones de abril logramos un diputado y en esta ocasión no ha sido posible», lamenta al tiempo que asegura que «un fracaso de este calibre» le da más fuerzas a los miembros de la formación naranja, que están «más ilusionados que nunca por sacar a España adelante».
Ahora la prioridad de este partido que es «actuar por España, por la unidad de la nación y por reconstruir el partido, que también es positivo y necesario», apostilló. Y en esa línea continuará en los próximos meses, donde por el momento no se habla de cambios ni de nuevas caras a nivel provincial : «Francisco Fernández-Bravo encabezó la lista al Congreso por Ciudad Real y no ha salido, por lo que ahora será un afiliado de base con el que contaremos con su experiencia y capacidad igual que otros muchos, por lo que valorar ahora quién se puede presentar en un futuro a nuevas elecciones no solo sería prematuro sino también irresponsable», argumenta en declaraciones a La Tribuna. En este sentido, lanzó un mensaje al resto de partidos instándoles a «que dejen enfriando el champán porque Cs no ha desaparecido» y declaró que la dimisión de Albert Rivera al frente de la presidencia del partido ha sido un ejemplo para el resto de partidos, pues «ha hecho lo que ningún político hace nunca en este país; dimitir», por lo que tuvo palabras de agradecimiento para quien «hubiera sido el mejor presidente de España».