El Ministerio prevé contratar más plantilla para las becas

M. Lillo
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Informa que tras el adelanto de la convocatoria, en diciembre se habían pagado el 77% de las ayudas. Además, el Gobierno aprobó incrementar en 900 euros las ayudas de residencia

El Ministerio prevé contratar más plantilla para las becas - Foto: RUEDA VILLAVERDE

El Ministerio de Educación quiere dar respuesta a la demora en algunos de los pagos de becas que se han señalado desde el ámbito universitario de distintas ciudades españolas y ya avanza que «para la próxima convocatoria se va a financiar la contratación de más personal para agilizar todavía más esta gestión». Así lo dieron a conocer a La Tribuna tras recordar que el año pasado se reformó el sistema de becas y se adelantó cuatro meses la convocatoria. 

«La convocatoria de este curso se adelantó a marzo, una petición de familias y alumnado, para que al matricularse sepan si cumplen con los requisitos económicos para recibirlas y disminuir la incertidumbre», expusieron desde el Ministerio que lidera Pilar Alegría, desde donde agregaron que a pesar de estos cambios en el conjunto del país «en diciembre habían cobrado un 77 por ciento de los becarios, frente al 64 por ciento del año anterior». 

Aun así, el Ministerio plantea la necesidad de agilizar más la gestión para hacer efectivas estas ayudas y de ahí que ya adelante que incrementará los efectivos que se encargan de su tramitación. 

Por su parte, desde la Universidad de Castilla-La Mancha expusieron a este diario que están pendientes de que el Ministerio termine de resolver las becas universitarias para poder conocer así todas las situaciones del alumnado que demanda recursos económicos y resolver las ayudas de emergencia social que concede la institución académica castellano-manchega.

Becas de residencia.

No es la única novedad que se llevará a cabo en el sistema de becas universitarias, ya que el Consejo de Ministros aprobó a mediados del pasado mes de febrero el incremento de las ayudas en 900 euros. De este modo, los estudiantes que estudien en un lugar distinto al de su hogar y cumplan los requisitos pasarán de cobrar 1.600 a 2.500 euros, una medida con la que se quiere favorecer a los alumnos de la llamada España Vaciada.