Dos testigos de la defensa, "en paradero desconocido"

Manuel Espadas
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La sexta sesión del juicio contra Carlos Andrés Bustamante por el asesinato de Nancy Paola Reyes apenas ha durado media hora tras la no comparecencia de dos personas que habían sido requeridas por el abogado del acusado

El acusado y su abogado defensor, durante la comparecencia de una testigo. - Foto: Rueda Villaverde

La sexta jornada del juicio por el asesinato de Nancy Paola Reyes, que se está llevando a cabo en la Audiencia Provincial con jurado popular, apenas ha durado media hora después de que la magistrada diera por levantada la sesión tras la no comparecencia, por estar "en paradero desconocido", de dos testigos que había solicitado el abogado del acusado, Carlos Andrés Bustamante. Sí han declarado tres policías nacionales que intervinieron en su detención en Madrid y dos testigos particulares. A la expareja de la víctima, con la que residía en Ciudad Real, se le acusa de un delito de asesinato con el agravante de alevosía, un delito de aborto al estar ella embarazada y otro delito de profanación de cadáveres por haber descuartizado su cuerpo, por lo que el Ministerio Público solicita una pena de 33 años y cinco meses de prisión, tras los hechos sucedidos en Santander en agosto de 2020.

En cuanto a la declaración de los agentes de la policía nacional que intervinieron en el atestado de cuando el acusado acudió a una comisaría de Madrid a denunciar, el 27 de agosto de 2020, la desaparición de Nancy, estos confirmaron que Carlos Bustamante se presentó en una comisaría de Leganitos alertando de que "una persona a la que él se refería como su mujer, que estaba embarazada y que ejercía la prostitución", había desaparecido. En ese momento se procedía a su detención tras comprobar que sobre él pesaba un delito anterior de violencia doméstica. Durante su registro y cacheo se le encontraron colgantes de bisutería que pertenecieron a la víctima, tanto debajo de la mascarilla como en un doblez del pantalón. Presentaba heridas en los nudillos y arañazos en un brazo y en la cara, además de una "importante cojera".

También se sometieron a las preguntas del fiscal y los respectivos abogados la camarera de un bar de Santander y su madre, quienes tuvieron un encuentro con el acusado días antes de que el fatal desenlace de la desaparición de Nancy saltara a los medios de comunicación. El mismo día del asesinato, Carlos Bustamante entró en el bar Bambú pidiendo dinero. "Estaba bebido y me dijo que como el bar era colombiano, igual que él, que le ayudara con dinero porque quería coger un tren a Madrid para viajar desde allí a Estados Unidos, donde su mujer había fallecido por Covid", ha relatado Catherine, que recuerda que llevaba una muleta y gorra, y que tenía marcas en el brazo y en la cara. "Estaba llorando y pidiendo también dinero a los clientes. Yo le dije que solo le podía invitar a una bebida y se la di. Mandé un mensaje a mi compañero para que saliera a la barra porque no me gustaba su actitud. Luego llegó un cliente y mi madre, a los que le contó lo mismo, y entre los dos lo sacaron del bar", explicó esta camarera, que en cuanto vio su fotografía "en los periódicos", se puso en contacto con la policía para compartir esta información, aunque las imágenes de seguridad del establecimiento ya se habían borrado por haber pasado varios días de aquel encuentro.

Carlos Andrés Bustamante, acusado del asesinato de Nancy Paola Reyes, durante el juicio.Carlos Andrés Bustamante, acusado del asesinato de Nancy Paola Reyes, durante el juicio. - Foto: Rueda Villaverde

La vista por el asesinato de Nancy Paola Reyes, nacida en Guatemala y residente en Ciudad Real, ha iniciado hoy su segunda semana de celebración y tiene previsto concluir el próximo lunes 21 con la formulación desde las partes de sus conclusiones penales, tras lo cual el juicio quedará pendiente del veredicto que deberá tomar el jurado popular.

 

 

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