«Es curioso que dudemos de la vacuna»

Hilario L. Muñoz
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El presidente del Colegio de Farmacéuticos repasa algunos de estos cambios que ha traído la pandemia y señala aspectos claves para el futuro.

«Es curioso que dudemos de la vacuna» - Foto: Tomás Fernández de Moya

Las farmacias han sido una parte esencial en la gestión sanitaria de la pandemia del coronavirus. Se han convertido en un punto informativo de primer orden, espacio de apoyo a la atención primaria y han estado al cargo de algunas campañas lanzadas por las administraciones.

¿Cuál ha sido el impacto del COVIDen la farmacia de Ciudad Real?

La farmacia está jugando un papel importante en la lucha contra la pandemia. Hemos sido un punto de información necesario, un punto de apoyo al paciente y a la atención primaria en ese reto que es la atención a distancia. Aparte, la farmacia lo ha asumido con responsabilidad y todos los profesionales del sector han dado el ‘do’ de pecho. Si hay que poner una nota a la farmacia solo cabe el diez, a pesar de que nos hubiese gustado hacer mucho más y creemos que podríamos haber hecho mucho más en la lucha contra la pandemia. 

¿Han recibido ya la vacuna todos los profesionales de farmacia?

Desgraciadamente no puedo decir que el 100% de los farmacéuticos estén vacunados. En Castilla-La Mancha quedan aún muchos profesionales por vacunar y la pasada semana preparamos un registro de las personas que quedan para enviárselo a la administración y que tengan a bien, como profesionales en primera línea que somos, el terminar de vacunarnos.

¿Qué papel juegan las farmacias en la vacunación?

Ya estamos jugando un papel fundamental en la formación y en que los pacientes reciban una información veraz. El farmacéutico es el especialista del medicamento y las vacunas entran dentro de nuestro campo de sabiduría. Veo, desgraciadamente, en muchas tertulias a muchos no expertos que se atreven a opinar en algo que no les concierne. Veo pocos farmacéuticos o médicos y los que veo insisten en la vacunación, en confiar en el sistema. Me gustaría que hubiese una estrategia universal en la que todos los países nos pusiéramos de acuerdo en cómo utilizar las vacunas. Que un país lo utilice de una manera y otro de otra, genera ese debate en el que participa mucha gente que no controla el tema. Al final esto influye en la percepción de la sociedad ante el único elemento que nos puede sacar de la situación en la que estamos. Me resulta curioso el que dudemos de esa herramienta necesaria para salir de la pandemia y normalizando que estén muriendo centenares de personas a diario. Se debe hacer un ejercicio de responsabilidad y buscar una información veraz que motive a la gente y nos saque de este mal sueño. 

¿Cualquier persona puede acudir a su farmacéutico a buscar consejos?

Ya estamos recibiendo a pacientes que dudan de si se deben poner la vacuna o que tienen una patología crónica y acuden a preguntarnos si hay alguna contraindicación para la vacuna. Desde el farmacéutico van a recibir la información y el mejor consejo que pueden recibir. Yo pediría a todos aquellos que tengan dudas que acudan a su farmacéutico a consultar y que no se motiven por lo que digan gente sin formación específica en este campo en algunas tertulias. 

Se habla de una crisis de ventas. ¿Se ha notado en las farmacias?

La farmacia ha sido esencial durante la pandemia y no ha cerrado las puertas a no ser que haya habido un contagio y se haya tenido que buscar una alternativa, pero la crisis también está afectando. La oficina de farmacia vive de lo que vende. Tiene una parte que es la profesional, el medicamento, que bueno evidentemente se ha mantenido constante y otra parte que es la parafarmacia, con las cremas solares en verano o los antigripales en invierno, que ha caído de una manera estrepitosa. El hecho de que no haya gente en la calle también influye, no sale, y en farmacias de pueblos muy pequeños pues se ven resentidas. No nos vamos a quejar porque entendemos que hay otros negocios que lo están pasando mal y hablamos con prudencia en ese aspecto. 

¿Hay farmacias que se hayan incluido en el grupo de las farmacias de viabilidad económica comprometida (VEC)?

Esto ocurre una vez que termine el año y cuando esperamos que se incremente el número de farmacias VEC es a finales de este año.

¿Cómo ha sido la situación del stock de las farmacias con las mascarillas o el paracetamol?

De paracetamol no ha habido desabastecimiento en ningún momento. Sí que se habló, en un momento, de que había una demanda masiva de paracetamol porque la gente quería estar prevenida a tener fiebre o malestar y se hizo cierto acopio, vigilado de forma responsable por la oficina de farmacia. Realmente problemas de abastecimiento no ha habido. 

Solo hubo de mascarillas en el inicio de la pandemia...

Las mascarillas como producto sanitario evidentemente han vivido una etapa difícil durante todo el año, sobre todo al principio. La farmacia es un establecimiento sanitario y como tal está sometida a una intervención absoluta y todo lo que se dispensa debe llevar el registro de calidad que supone que haya una oficina de farmacia detrás. Como tal, las oficinas solo nos podemos abastecer de distribuidores autorizados y que cumplen con la normativa sanitaria. Esto hace que al principio sobre todo, cuando estos distribuidores están intervenidos por el Estado, ocurriese la paradoja de que había mascarillas en todos sitios menos en la oficina de Farmacia, porque teníamos los canales intervenidos. Había mascarillas en el ultramarino de la esquina, en grandes supermercado, pero en la oficina de farmacia no había. Cuando la demanda se normalizó, esos canales se abrieron y la oficina de farmacia pudo incorporar ese producto sanitario al stock. Ahora mismo está normalizado el suministro y garantizado, con precios intervenidos, como demandó la oficina de farmacia. Fuimos los primeros en abril que alertamos al Gobierno de que había que intervenir los precios y bajar el IVA de las mascarillas. Creo que se está haciendo por norma general una distribución responsable de este producto sanitario.

La farmacia lleva un año pidiendo hacer test de coronavirus, poner vacunas... pero estas peticiones no se han visto reflejadas. 

Empezando por la vacunación, hay un plan que es complicado de llevar a cabo por la cantidad de dosis que se reciben. Nosotros nos hemos puesto a disposición de las autoridades sanitarias para que vean en nuestros establecimientos sanitarios como un lugar donde llegar a más gente a la hora de esa vacunación masiva. Creemos que es un lugar apto y siempre hay una manera de poder hacerlo. El ofrecimiento está encima de la mesa y si la administración no lo atiende es porque tendrá razones para hacerlo.

¿Y en cuanto a los test?

Hemos visto a otras comunidades autónomas en las que sí se ha utilizado a la oficina de farmacia en estrategias de detección del virus. En Madrid están participando ciertas farmacias en la realización de test de antígenos. Yo particularmente creo que esto es algo bueno para la población, porque son más puntos de detección garantizados, siempre por un protocolo pactado con la administración. Resulta paradójico que actualmente cualquier persona pueda adquirir de manera descontrolada un test sin estar asesorado por personal sanitario. No es difícil encontrarlos por internet;en farmacias alemanas se pueden encontrar pero en la oficina de farmacia de España no se puedan dispensar. Desde mi punto de vista es un error. está hecho el ofrecimiento a la administración y si en algún momento se hace contarán con nosotros, como se hace, y con éxito, en otras comunidades autónomas. Puedo contar casos de personas que han acudido a la farmacia relatando que han tenido contacto con un positivo, ayer, a decir que me quieren hacer un test de antígenos. Yo no se lo puedo dar ni lo debo hacer, pero sí que le puedo informar que debe esperar cuatro o cinco días en casa para esperar hasta que la carga viral sea suficiente para que el test detecte la presencia del virus. Si lo hiciese en la oficina de farmacia esa persona, reacia a ir al centro de salud y que ha estado con un positivo, estaría localizada. Del otro modo, lo que hace esa persona es adquirir un test en internet sin control, que se hace el día después de haber estado en contacto con el positivo y puede ser una amenaza porque ese test está mal hecho. 

La farmacia ha sido importante para la nueva normalidad como espacio de formación en aspectos básicos de la salud, como las mascarillas. ¿Cómo ha sido el cambio de explicar el uso de cremas u otros medicamentos a estos elementos de uso diario?

El farmacéutico es el especialista en el medicamento y también especialista en formación de productos sanitarios como es la mascarilla. Hemos enseñado a utilizar bien la mascarilla, se ha hecho distribución de mascarillas en dos campañas participando con la administración. La farmacia ha jugado un papel importantísimo como punto de información verídica y a día de hoy es importante porque se dicen muchas barbaridades en algunos medios. Se busca el sensacionalismo y hay que apartarse de eso. Han salido muchos bulos con medicaciones que podían alterar y dejar de tomarlos influye en los pacientes y el farmacéutico ha jugado un papel fundamental. 

Más allá de lo normativo, ¿qué cambios ha traído el coronavirus en el día a día de la oficina de farmacia?

Hemos trabajado de la mano del Sescam para garantizar la prestación farmacéutica y ser un apoyo de la atención primaria y que el paciente tuviese con garantías una continuidad asistencial, no solo farmacéutica. Esos cambios que han podido traer la pandemia han permitido incorporar en receta electrónica medicación de pacientes que estaba caducada, en un momento de la pandemia; trabajamos en renovaciones automáticas de la medicación con el Sescam; y siempre el farmacéutico, en casi todas las localidades de la provincia y la región, ha pactado una forma de atención con los centros de salud para servir de apoyo a la Atención Primaria y garantizar que el paciente tuviese su medicación. Hay una colaboración más directa con médicos de Atención Primaria. La farmacia siempre se ha adaptado a la situación y esta vez no ha sido distinto. Hemos intentado apoyar en todo lo posible a nuestros pacientes.

Un elemento que se ha acelerado es la receta electrónica privada, ¿no?

En plena pandemia se levantó un sistema para garantizar esa prestación electrónica a esos pacientes mutualistas que tenemos cogida con pinzas y estamos aún por desarrollar. Se trata de algo que ha venido para quedarse, pero todavía queda por desarrollar ese sistema de manera definitiva.