Las obras del polígono Sepes para «septiembre u octubre»

M. Lillo
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Desde el Ayuntamiento de Ciudad Real se muestran optimistas tras la reciente reunión mantenida con Sepes y por la calendarización de este proyecto

Paneles informativos en el terreno del polígono. - Foto: Tomás Fernández de Moya

Poco o nada trascendió de la reunión que mantuvo el pasado día 16 la alcaldesa de Ciudad Real, Eva Masías, con el director general de la Entidad Estatal de Suelo (Sepes), Fidel Vázquez. Un encuentro en el que, según ha podido saber este diario, Sepes apuntó que el inicio de las obras del polígono Oretania se producirá «en septiembre u octubre».
Se trata de una fecha que llegará tras la licitación que tiene previsto hacer la entidad estatal en el primer cuatrimestre de este año, momento a partir del cual se deben clasificar las ofertas y resolver todos los trámites relativos a la adjudicación, de manera que los trabajos no se desarrollarán hasta esos meses de otoño, según detalló a este diario el presidente del Impefe, Pedro Maroto, quien también estuvo presente en el encuentro.

Desde el Ayuntamiento de Ciudad Real se han mostrado satisfechos con el resultado de la reunión por el mantenimiento del compromiso por parte de la entidad estatal pese a la situación de encarecimiento de los materiales de construcción y también porque se estableció un calendario para convertir en una realidad la primera fase de este polígono, que abarcará 131.916 metros cuadrados. «Más allá de compromisos y cronograma, hemos visto cómo avanzan los plazos, pero no les puedo adelantar más», dijo la alcaldesa al ser preguntada la semana pasada por esta reunión, que calificó de «fructífera».

De esta forma, sólo ha trascendido que será en «septiembre u octubre» cuando las máquinas comiencen a trabajar en el terreno, unas obras que podrán ser compatibles con la construcción de las propias naves por parte de empresas, si bien de momento se desconoce si el precio de venta de las parcelas por parte del Ayuntamiento, que adquirió 50.000 metros cuadrados, seguirán siendo los 87 euros el metro cuadrado que ofertó Sepes en su día y que motivó que se quedara desierto.