Representantes del sector de la ganadería de lidia se reunieron este lunes con la directora general de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla-La Mancha, Cruz Ponce, para abordar la «tragedia» que están viviendo los ganaderos del campo bravo ante la falta de ingresos por la suspensión de festejos taurinos a causa del coronavirus.

Durante el encuentro, el sector pidió a la Junta de Comunidades ayudas directas a las explotaciones de ganaderías de lidia para poder paliar así las pérdidas sufridas por el COVID-19 pero el Gobierno regional «deja sin ayudas a los ganaderos de bravo de la región», lamenta Macarena Gallego, de las ganaderías de toros del Ojailén y Javier Gallego de Ciudad Real y una de las personas que asistió a la reunión.

«Nos hemos encontrado nada más que la negativa a tender una mano a la necesidad de ayudas urgentes y necesarias que otras comunidades autónomas como Madrid ya han concedido». Y es que al parecer, las explicaciones del Gobierno regional a estas demandas, y según relata Gallego, es que «no hay posibilidad de ayudas de fondos propios porque ya están gastados y las ayudas mediante Programa de Desarrollo Rural ya están comprometidas». Todo ello, junto a la «imposibilidad» de dedicar una partida en los presupuestos del año que viene porque «ya están casi cerrados».

Por todo ello, el sector «indignado y desolado» ha dado de plazo hasta el viernes para mantener una reunión con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, en la que abordar este tema. De no celebrarse dicho encuentro, el sector no descarta manifestarse la próxima semana frente a las Cortes regionales para reivindicar el apoyo de la Junta de Comunidades. «La situación ahora es drástica pero a finales de año será caótica y necesitamos sentirnos apoyados de alguna forma por el Gobierno regional», insiste la ganadera ciudadrealeña.