Los embalses sufren la escasez de recursos y el campo también y con esta situación «complicada», la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja) hace cuentas y examina los efectos negativos que puede tener en los cultivos y también en el bolsillo de los agricultores y ganadores. En concreto, el presidente nacional de Asaja, el ciudadrealeño Pedro Barato, apuntó a un descenso de las cosechas de uva y de aceituna de alrededor del 30 por ciento, si bien en algunos casos puede llegar hasta el 80 por ciento de merma. Ello, prosiguió, tendrá una gran incidencia económica en el sector, por lo que afirmó que las pérdidas por sequía pueden alcanzar los 8.000 millones de euros en el conjunto del país. En el caso de la región, desde la organización indicaron que dichas pérdidas pueden superar los 800 millones de euros, si bien indicaron que en el caso de Ciudad Real se analizará la situación comarca por comarca para realizar un informe de las pérdidas concretas que puede suponer.

«La sequía está haciendo mucha mella en el campo y si a ello le sumamos el incremento de los costes de producción, es la tormenta perfecta», afirmó Barato en declaraciones a este diario. Además, agregó que «si hace años se hablaba de una España húmeda y una España seca, desgraciadamente hoy solo podemos hablar de una España seca».

Barato habló también de la situación que sufre la ganadería, «con el precio del pienso que no baja», y del impacto que tendrá la sequía en la agricultura, lo que se traducirá en menores producciones. A ello se suma, dijo, «las restricciones tremendas» con las que cuenta el sector para el riego con aguas subterráneas y sobre todo «la falta de obras hidráulicas».

«Ya no vale hablar ahora de sequía, sí, ahora se habla de ella porque ha llegado la sequía, pero el problema es la falta de obras hidráulicas en toda España y en particular en nuestra provincia», dijo Barato tras poner de manifiesto que desde hace años su organización reclama actuaciones como el pantano de la zona de Montizón, la tubería manchega o los aportes de agua de los trasvases, así como la «interconexión de cuencas».

«No vale hablar de sequía, cuando antes hablábamos de una España seca y una España húmeda, cuando ahora toda España es seca, por lo que no caben dilaciones. El cambio climático está ahí, más a nuestro favor, por lo que en vez de estar despilfarrando el dinero, hay que hacer una vertebración hidrológica adecuada», insistió el presidente nacional de Asaja tras exponer las consecuencias negativas de la falta de reservas que sufre el campo.