La selección española femenina de balonmano, con la portera ciudadrealeña Merche Castellanos en sus filas, tratará de dar este miércoles (20:00) un paso casi definitivo hacia el Europeo de 2022 con un triunfo en casa de Eslovaquia, que dirige el exseleccionador español Jorge Dueñas, que pondría a las "Guerreras" con pie medio en la máxima cita continental.

Para ello, el conjunto español, semifinalista en el pasado Mundial de España, confía en el retorno de las laterales Alexandrina Barbosa y Almudena Rodríguez, que regresan al equipo tras perderse las dos últimas jornadas de la fase de clasificación.

Igualmente volverán a la convocatoria la central Carmen Campos y la pivote Kaba Gassama, que no pudieron participar por problemas físicos en el doble enfrentamiento que el conjunto español disputó con Hungría el pasado mes de marzo.

Por contra, el seleccionador español José Ignacio Prades no podrá contar en la localidad eslovaca de Michalovce con la extremo Jennifer Gutiérrez, que será sustituida por la joven Ona Vegué, que vestirá por primera vez la camiseta de las "Guerreras" en un encuentro oficial, tras debutar en abril de 2021 en los amistosos disputados ante Dinamarca.

Cambios que no varían el papel de favorito del equipo español, que podría, incluso, certificar matemáticamente la clasificación para el Europeo si logra vencer a Eslovaquia y Portugal no logra ganar a Hungría, el jueves, en la localidad lusa de Loulé.

Especulaciones en las que no quieren caer las "Guerreras" que prefieren centrarse en cumplir con su parte del guion y derrotar a un conjunto eslovaco al que las de Prades ya se impusieron por 33-28 en el choque de ida disputado el pasado mes de octubre en la localidad malagueña de Antequera.

Un duelo en el que no se encontraba todavía al frente del equipo centroeuropeo el español Jorge Dueñas, el técnico que llevó a las "Guerreras" al bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, que fue nombrado nuevo seleccionador eslovaco el pasado mes de febrero.

Pero ni la llegada de Dueñas, que saldó con derrotas sus dos primeros encuentros ante Portugal, pudo impedir que Eslovaquia llegue al duelo con las "Guerreras" sin ninguna opción de clasificación.

Una circunstancia que permitirá al técnico español seguir probando jugadoras con vistas al futuro como la jovencísima pivote Viktoria Gyorova, a la que Jorge Dueñas hizo debutar con tan sólo 18 años el pasado mes de marzo ante Portugal, o la lateral Olivia Scipova, de 19, que se estrenará ante las "Guerreras".

No obstante, el mayor peligro para el equipo español llegará de la fornida pivote Nikoleta Trunkova, que ya firmó siete tantos en el choque de ida.

Los mismos que anotó la lateral izquierdo Simona Szarkova, jugadora del Siofok húngaro, que se perderá la cita por problemas físicos, lo que acrecentará el protagonismo ofensivo de la joven lateral derecho Barbora Lancz, que pese a sus tan sólo 19 años ya fue la máxima goleadora del equipo eslovaco en el pasado Mundial de España.

Argumentos que no merman la ambición de la selección española que no sólo quiere lograr el billete para el Europeo que se disputará el próximo mes de noviembre en Eslovenia, Macedonia y Montenegro, sino que quiere hacerlo como primero de grupo.

"El grupo está muy concienciado de lo que supone acudir a un Campeonato de Europa y de la dificultad de pelearlo con otros dos equipos que tienen opciones. Nuestro objetivo es sacar los cuatro puntos y apurar nuestras opciones de ser primeras de grupo", señaló el seleccionador español José Ignacio Prades.

Un objetivo para el que España no sólo deberá vencer este miércoles a Eslovaquia, sino también el próximo domingo a Portugal en Irún, además de esperar un tropiezo de Hungría, con quien figura igualada a puntos en la clasificación, pero que ocupa la primera plaza del grupo gracias a su mejor diferencia de goles en los enfrentamientos directos.