Ciudad Real restó casi 800 desempleados durante el pasado mes de abril, el que coincidió con el desarrollo de una Semana Santa que llegó a rozar el lleno en los hoteles de zonas como la comarca del Campo de Calatrava y que ahora tiene su reflejo en la evolución del mercado laboral. Según el Ministerio de Trabajo y Economía Social, este abril fue, en lo laboral, el mejor desde 2017 y el sector servicios, el que más vinculado está a la marcha del turismo, rebaja sus cifras de parados al dato más bajo desde la campaña de Navidad de 2009.

El impacto de la Semana Santa se ve, también, en la evolución del dato de afiliación. En un mes, la Seguridad Social ha ganado casi 1.000 afiliados en el régimen general, de los que casi la mitad, 454, aparecen en el sector de la hostelería. De hecho, si se compara el mercado laboral de hace un año al actual, los datos de afiliación son todavía mejores: hay ahora casi 7.200 personas más trabajando en el régimen general que antes, con cerca de 1.700 personas más con empleo en la hostelería y otros 2.800 en la administración pública.

Esta evolución del paro en abril deja a la busca de un trabajo a 40.193 personas en la provincia. Son 11.500 personas menos que hace doce meses gracias a la reactivación de los servicios una vez superadas las restricciones provocadas por la pandemia. Este sector aglutina el 60% del descenso del paro en un año, periodo en el que el desempleo también baja en la agricultura, la industria y la construcción y apenas crece entre los que no tenían un empleo antes.

Los buenos datos del desempleo de abril vienen acompañados de otro empujón a la contratación indefinida que por primera vez en la historia suponen más de la mitad de las altas laborales firmadas en un mes. Según recoge el Servicio Público de Empleo Estatal, en el último mes en la provincia se firmaron 10.686 contratos de los que 5.456 fueron indefinidos, el 51 por ciento del total.