Lo ha vuelto a hacer. Araceli Hidalgo se ha vuelto a convertir en la protagonista de un nuevo hito en la lucha contra la pandemia al ser la primera persona en Castilla-La Mancha en recibir la tercera dosis de la vacuna contra el Covid-19. Ya lo hizo con el primer pinchazo de España, en aquel lejano 27 de diciembre de 2020, dando paso a la esperanza de alcanzar una ‘nueva normalidad’ gracias a la inmunización de la que fue pionera, y animando al resto de la población a no tener miedo. Todo un símbolo de fortaleza y esperanza que abrió camino y que hoy sigue siendo punta de lanza en este proceso con esta nueva dosis de recuerdo.

El presidente autonómico, Emiliano García-Page, que la considera ya «amiga del alma», elogió el tesón y energía de Araceli y anunció que en el mes de octubre se empezará a vacunar a todas las personas de más de 65 años pero más allá de las puertas de las residencias. Un «reaseguro» para mantener a salvo a los mayores, y que se hará de común acuerdo con el resto de autonomías y el Ministerio. Un ejercicio que dijo querer acompasar con el de la vacunación de la gripe. «Si puede ser a mitad de mes mejor que a finales, pero en octubre», subrayó.

La ministra de Sanidad estuvo presente en este gesto y quiso recordar la «emoción compartida» cuando Araceli recibió la primera dosis. «Hoy estamos aquí para acabar lo que se empieza y lograr ese objetivo de llegar al cien por cien vacunado».

La inmunización se acerca al 77% de la población con pauta completa y al 90% en mayores de 12 años con al menos una dosis, según los datos aportados por Darias, «pero tenemos que seguir» afirmó.

Para el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, volvió a ser «un ejemplo a seguir». «Estamos viviendo en un país que entiende bien lo que hay que hacer por los demás, y eso es un signo que siempre llevaremos con nosotros», dijo.