El año 2020 acaba con una buena noticia para la provincia de Ciudad Real, ya que el Consejo de Ministros del pasado viernes acordó una inversión importante para la carretera entre Ciudad Real y Toledo, la N-401. Se trata de una obra aprobada por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana mediante un acuerdo en el que se toma razón de la declaración de emergencia de las obras de rehabilitación del puente Nolaya, situado en el punto kilométrico 179,700 de la carretera N-401. La inversión aprobada es de 708.742,76 euros dentro de un paquete por el que se declaran de emergencia una decena de inversiones, lo que implica la disposición para desarrollarlas por un trámite más rápido y se dota presupuestariamente a estos proyectos. 

«Es una buena noticia que el Consejo de Ministros tenga en cuenta esa inversión para la provincia de Ciudad Real», dijo en declaraciones a La Tribuna el diputado nacional del PSOE, Miguel González. Para el parlamentario, con esta actuación, «se demuestra el compromiso del Gobierno».

El Ejecutivo ha intervenido anteriormente en este tramo de la carretera de Toledo ubicado en la conexión del pantano del Vicario con el río Guadiana. Por ejemplo, en 2007 se intervino en el punto kilómetro 179,3 con 308.345,49 euros. Se trata del tramo de salida del puente en dirección a Toledo. Al tratarse ahora del punto 179,7, la intervención aprobada por el Consejo de Ministros del pasado martes implica la actuación sobre el tramo de entrada en el puente, en dirección a Toledo. 

La inversión llega por sorpresa, porque no se encontraba en ningún documento oficial hasta ahora, y la toma en consideración implica que comienza su proceso administrativo, licitación y adjudicación, por lo que como mínimo hasta pasado el primer trimestre no comenzarán los trabajos de mejora en esta infraestructura sobre el Guadiana. La anterior obra, de 2007, supuso tres meses y medio de trabajos,; ahora falta por saber el contenido del proyecto, para conocer su duración.