La Consejería de Sanidad no cuenta con expedientes para tramitar derivados de incumplimientos por fumar desde el inicio de la pandemia. Se trata de una situación novedosa y que muestra que las fuerzas de seguridad se han centrado en el cumplimiento de otras normativas sanitarias como el uso de las mascarillas y aquellos aspectos destinados a frenar los contagios de coronavirus. Así lo expuso el delegado de Sanidad en la provincia, Francisco José García, quien recordó las cifras ya avanzadas por La Tribuna de Ciudad Real en la provincia, con un millar de expedientes abiertos por el mal uso de la mascarilla. «Es verdad que es algo muy evidente si se cumple o no el uso obligatorio de la mascarilla y las fuerzas del orden público, que son las que realizan denuncias nos las transmiten a nosotros», dijo Francisco José García.
El delegado recordó que «si la ley antitabaco ya era restrictiva», ahora con la normativa COVID «no se puede fumar si hay una distancia de menos de dos metros». Igualmente, apuntó que el pasado 2 de noviembre se envió un comunicado desde la Delegación provincial de Sanidad a los ayuntamientos en el que se recordaba que las terrazas debían no tener techo o no tener dos paredes para que se consideren que están al aire libre y, por lo tanto, se permite fumar, siempre que se cumpla la otra norma, que haya una distancia entre las personas. En este sentido, el delegado hizo «una llamada a la responsabilidad de los ciudadanos y empresarios que deben velar por el cumplimiento de la normativa».
Sanción grave.
Francisco José García recordó que todas las sanciones en materia coronavirus se están tramitando y se abonan. De hecho en la provincia con más de medio millar de expedientes cerrados, apenas hay reclamaciones de personas sancionadas, por lo obvio que resulta el llevar o no mascarilla. Además, hay otras sanciones por diversos motivos como una impuesta a una empresa «por saltarse normas de aislamiento» a la que se le impuso una multa de 100.000 euros. Terminó pagando 60.000, al abonarla en el periodo de pronto pago, por cometer una infracción muy grave contra la salud pública al haber «un local cerrado» en el que había personas trabajando que habían dado positivo en coronavirus.
El delegado de Sanidad señaló con este ejemplo que las multas se tramitan al igual que ocurría antes de la pandemia con otras normativas sanitarias y apuntó que la multa de mascarilla es de 100, pero juntarse más de seis personas puede suponer una sanción de hasta 3.000 euros.