El Vestas Alarcos cosechó un triunfo muy trabajado ante un Esplugues recién ascendido a la categoría y que aún no sabe lo que es puntuar, pero que se mostró como un conjunto muy difícil de batir. El equipo de Jesús Herrero, diezmado por las bajas, supo ponerse el mono de faena para obtener dos puntos que le consolidan en la zona alta de la tabla y le acercan al objetivo de luchar por el ascenso.
Con las bajas de Víctor Enebral, Óscar Ruiz, Manu Díaz y Adrián Mendoza, el técnico alarquista tuvo que tirar de la cantera y así entraron en la convocatoria jugadores como Pablo Cano, Gonzalo López-Tola, Marcos Herrera e Igor Cano. Estos dos últimos debutaron en la categoría, un dato positivo dentro de una semana marcada para el club por la preocupación por el estado físicos de sus jugadores, con dos positivos, el susto de Víctor Enebral o un esguince de tobillo de Manu Díaz.
El conjunto local tomó el mando desde los compases iniciales y el 9-4 que reflejaba el electrónico en el ecuador del primer periodo obligó al técnico visitante a solicitar tiempo muerto. Mejoró entonces el Esplugues, especialmente en defensa, si bien, el Vestas Alarcos mantuvo su firmeza atrás. Por ello, y a pesar de estar nueve minutos sin marcar, el conjunto manchego continuó al frente del marcador. Con 10-7 en el minuto 24 llegó el debut de Marcos Herrera en la División de Honor Plata y el joven extremo incluso anotó el gol del 12-8 (m. 28). Con 12-9 se llegó al descanso y la sensación de que a poco que mejorase el ataque de los manchegos el choque podría resolverse sin grandes apuros.
Tras la reanudación, el Vestas Alarcos no consiguió romper el choque de salida, aunque el Esplugues sólo pudo llegar a colocarse a dos tantos. Un tanto de Samuel Gómez puso el 21-16 en el minuto 45 y el técnico visitante decidió parar el choque. La reacción de los suyos fue fulminante (21-19, m. 49), pero el Vestas Alarcos respondió con un parcial de 3-0, con tanto de Álex Plaza, Jota Serrano y Palacios, aprovechando una exclusión de Mario Rivas.
Con 24-19 (m. 52) Jesús Herrero pidió tiempo muerto para saber gestionar bien esos minutos finales y Álvaro Torres puso la máxima renta hasta ese momento (25-19, m. 53).
En la próxima jornada el Vestas Alarcos visitará la pista del Ibiza, rival directo en la zona alta.
FICHA TÉCNICA.
VESTAS ALARCOS. Adri Torres, Matías Galán (2), Álvaro Torres (3), Julián Souto (3), Samuel Gómez (2), Frank Cordiés (2), Íñigo Barricart (1) -equipo inicial- Palacios (3), Jota Serrano (3), Claudio Ramos, Pepe Mora (2), Álex Plaza (5, 4p.), Gonzalo López-Tola, Marcos Herrera (1) e Igor Cano.
HANDBAL ESPLUGUES. Ignacio Santos, Fernán Cisneros (1), Víctor García (1), Carlos Martín, Mario Rivas (2), Sergi Pérez (3), Josep María Grau (3, 1p.) -equipo inicial- Julen García (1), Sergi Guma , Héctor Fortuño (2), Joan Pi (2), Marc Bisbe (2), Martí Palet (1), Marc Romero, Víctor Torres (4), Pol Calvo (2).
ÁRBITROS. Crespo Gómez y Eiras Abalde. Descalificación directa a Frank Cordiés (m. 54). Excluyeron dos minutos a Cordiés, Palacios y Samuel Gómez; Mario Rivas (2), Marc Romero.
PARCIALES. 4-1, 5-4, 8-4, 10-6, 10-7, 12-9 (descanso); 15-12, 17-13, 20-16, 22-19, 25-20, 27-23 (final).
INCIDENCIAS. Encuentro correspondiente a la séptima jornada del Grupo B de la División de Honor Plata Masculina disputado en el pabellón Quijote Arena. La plantilla local mostró una pancarta de ánimo a su compañero Víctor Enebral, que no podrá jugar hasta después de Navidad por el durísimo golpe que sufrió la pasada jornada en Córdoba y que le obligó a estar hospitalizado unos días. Ya ha recibido el alta y se recupera en su domicilio.