Los dos misiles lanzados hoy por Corea del Norte fueron balísticos y de alcance intermedio, según informó el Ejército surcoreano, que también señaló que los proyectiles fueron disparados desde la misma zona donde Pionyang probó el jueves un motor de combustible sólido para un nuevo tipo de arma estratégica.
El Estado Mayor Conjunto (JCS) informó en un principio de que Corea del Norte había lanzado dos misiles balísticos no identificado al mar del Este (nombre que recibe en las dos Coreas el mar de Japón), y posteriormente dio más detalles de los enésimos test norcoreanos este año.
Los disparos tuvieron lugar desde la zona de Tongchang-ri, en la provincia de Pyongan del Norte, entre las 11:13 y las 12:05 del domingo hora local (2:13 y 3:05 GMT), según el JCS.
El Estado Mayor Conjunto surcoreano añadió que los misiles recorrieron unos 500 kilómetros y fueron lanzados en ángulos agudos, y considera que se trató de misiles balísticos de alcance intermedio.
El Ministerio nipón de Defensa informó por su parte de que los misiles alcanzaron una altura máxima de 550 kilómetros, y precisó que cayeron al mar en aguas fuera de su Zona Económica Exclusiva.
Estos lanzamientos llegan tres días después de que el régimen de Kim Jong-un realizara un test de un nuevo motor de combustible sólido para nuevos misiles de largo alcance en un año en el que ha realizado un número récord de pruebas armamentísticas.
Ese test tuvo lugar en la base de lanzamientos espaciales de Sohae (noroeste del país), ubicado también en Tonchang-ri, y según Pionyang sirvió para probar un motor de combustible sólido de "gran propulsión" para un "nuevo tipo de arma estratégica" en presencia de Kim Jong-un, lo que indica avances hacia el desarrollo de un nuevo tipo de misil balístico de alcance intercontinental (ICBM) más eficiente.
Los enviados especiales de EEUU, Corea del Sur y Japón para Corea del Norte mantuvieron una conversación telefónica tras los lanzamientos de este domingo, en la que destacaron la importancia de una firme respuesta internacional a las provocaciones de Pionyang y se comprometieron a reforzar la cooperación trilateral, según la agencia surcoreana Yonhap.
El nuevo test de hoy tiene lugar precisamente después de que la Asamblea General de Naciones Unidas aprobara el pasado jueves una resolución que llama a intensificar los esfuerzos globales para mejorar la situación de los derechos humanos en Corea del Norte.
También se produce después de que el viernes el Gobierno de Japón aprobara nuevas directrices de Defensa, que por primera vez incluyen la capacidad de atacar bases enemigas en caso de amenaza a la seguridad nacional, además de un incremento récord de su gasto militar.
El test del pasado jueves y los lanzamientos de hoy se suman al número récord de misiles de diversos tipos probados por el régimen norcoreano este año, lo que unido a sus preparativos para un nuevo ensayo nuclear, subraya la voluntad de Pionyang de continuar avanzando en su programa armamentístico y aleja la posibilidad de diálogo.