Pozuelo y Bolaños, citadas con la historia

Manuel Espadas / Eduardo Gómez
-

Los dos equipos comienzan este sábado su asalto al ascenso a la Liga Guerreras Iberdrola

La plantilla del Soliss Pozuelo, antes de un entrenamiento. - Foto: Rueda Villaverde

El balonmano de la provincia está ante un momento histórico. Dos equipos femeninos, Soliss Pozuelo y Bolaños, disputan desde este sábado las eliminatorias por el ascenso a la Liga Guerreras Iberdrola, máxima categoría del balonmano femenino español. Todo un éxito para dos modestos clubes de pequeñas localidades separadas por apenas 18 kilómetros y que en estos últimos años han ido forjando también una bonita rivalidad dentro y fuera de las pistas. 

Para las 'espartanas', como son popularmente conocidas las pozueleñas, será su primera fase. Líderes del Grupo D, quedaron emparejadas con el segundo del Grupo B, el Sporting La Rioja. El choque de ida será en Logroño este sábado (17 horas) y la vuelta se jugará en Pozuelo el sábado 7 a las 20 horas. Si esta fase supone el primer intento de las rojillas por subir, mucha más experiencia tienen las riojanas, cuya prioridad es el ascenso, un objetivo que ni mucho menos era el que se marcaba el Soliss Pozuelo.

Eusebio Angulo, presidente y entrenador de las 'espartanas', apela al espíritu de un conjunto que ha hecho de la humildad y el trabajo sus señas de identidad y que ya sabe lo que es ganar dos Campeonatos de España en categorías cadete y juvenil, éxitos que ahora se proyectan a la plantilla sénior. «Quiero que las jugadoras disfruten de la fase, pero compitiendo. Hemos trabajado mucho hasta aquí y todos en el club y en el pueblo tenemos mucha ilusión», explica Angulo. De hecho, y a pesar de que este fin de semana se celebra la romería en honor a la Virgen de los Santos, estarán arropados por cerca de un centenar de seguidores.

Las jugadoras del Balonmano Bolaños, en el pabellón Macarena Aguilar.Las jugadoras del Balonmano Bolaños, en el pabellón Macarena Aguilar. - Foto: Rueda VillaverdeEn principio, podrá contar con todas sus jugadoras, a las que el técnico ha querido inculcar que esta eliminatoria «es un partido de 120 minutos», en un claro guiño al ambiente que se vivirá en el choque de vuelta en un pabellón las Espartanas que estará lleno a reventar.

LA EXPERIENCIA. Para el Vino Doña Berenguela BM Bolaños ésta será su tercera fase de ascenso en cuatro años. Tras las intentonas de Tenerife 2019 y Logroño 2021, el equipo de Juanmi Fernández afronta esta eliminatoria contra Oviedo BF con una dosis extra de experiencia y madurez que podría valer su peso en oro. El orden de los partidos no beneficia los intereses de las berenguelas, que abrirán el fuego este sábado a las 20 horas en un pabellón Macarena Aguilar que debería convertirse en su mejor aliado fuera de la pista.

El objetivo es estar a la altura ante el campeón del Grupo A, a quien nadie fue capaz de ganar en su liga. El conjunto asturiano, después de 24 victorias y 2 empates, ha arrojado cifras que infunden respeto, con un promedio de más de 28 goles por partido anotados y menos de 20 encajados. Sin embargo, las bolañegas asumen el reto sin ningún tipo de complejo y con plena confianza en sus posibilidades. 

Además, desde el club se ha intentado evitar cualquier exceso de presión. «Subir es un objetivo del club que tarde o temprano llegará. Si no es este año, tampoco sería un disgusto enorme. El objetivo era estar en Oro, que es una categoría muy buena para el crecimiento deportivo de las chicas y al club le daría tiempo a crear la estructura necesaria. Pero si el ascenso llega ahora, no nos vamos a asustar», asegura la presidenta, Ana Almansa.

Con la única ausencia de Itziar Martínez, el BM Bolaños intentará plantar cara al Oviedo y, como poco, dejar la eliminatoria abierta de cara al segundo duelo en pista asturiana. Para ello, habrá que anular el potencial deportivo de una plantilla que, entrenada por Manuel Díaz, tiene a la toledana Carmen García-Calvo a su máxima goleadora (ha promediado 5 goles por encuentro), aunque también contará con una baja muy importante, la de su pivote Celia Rojo, clave tanto en ataque como en labores defensivas.

Al margen de lo competitivo, el BM Bolaños ha puesto mucha ilusión en esta cita para que se convierta en uno de esos días para el recuerdo en el deporte local y «una fiesta para el club, para todos sus jugadores, para la peña, la afición y para todo el pueblo», como desea su presidenta.    

Los ganadores de las cuatro eliminatorias a ida y vuelta (las otras dos son Lanzarote-Elda y Almassora-Beti Onak) se clasificarán para una fase final donde jugarán todos contra todos y los dos primeros subirán a la Liga Guerreras Iberdrola.

Estos ocho equipos ya tienen asegurada su presencia, como mínimo, en la Liga Oro, nueva categoría del balonmano femenino español que estará integrada por doce equipos en un grupo único de toda España, inmediatamente inferior a la Liga Guerreras Iberdrola.