El 1 de abril fue el día en el que los hospitales de Ciudad Real vivían sus peores momentos en la lucha contra el coronavirus. Esa jornada, el Sescam daba cuenta de 1.199 pacientes ingresados en los seis centros hospitalarios de la provincia, donde cada día se contabilizaban una media de casi 200 positivos por COVID-19 y el número de fallecidos crecía en torno a la treintena de personas que morían tras confirmarse la presencia del coronavirus en su cuerpo.
Dos meses después, la realidad que reflejan las cifras que aporta el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha es bien diferente. A fecha de 1 de junio, dos meses después, las personas que permanecen ingresadas en los hospitales de la provincia apenas supera la treintena, el número de casos positivos que hay que sumar a la lista de afectados por COVID-19 no alcanza la decena al día y la curva de los fallecimientos se ha conseguido frenar, ayer hubo que lamentar tres nuevas víctimas, con lo que la pandemia le ha costado la vida a 1.099 personas en la provincia de Ciudad Real, según Sanidad.
De hecho, tal y como ocurrió el fin de semana, Ciudad Real vuelve a tener centros libres de coronavirus, como es el caso del hospital de Manzanares, donde son ya dos días seguidos sin pacientes COVID, y el Virgen de Gracia de Puertollano, que suma ya cuatro días sin ingresos de pacientes en planta para ser atendidos por la pandemia.
En el resto de centros la evolución sigue a la baja o se mantiene, a excepción de en Valdepeñas, que sumó tres ingresos este lunes. El hospital que soporta la mayor carga de atención con pacientes afectados por coronavirus es el de Ciudad Real, con ya solo 15 personas ingresadas en planta cuando en el peor momento de la crisis sanitaria rozó los 400 pacientes.
En cuanto a la situación en las UCI, la provincia vuelve a contar con 22 personas entubadas, una cifra similar a la que se mantiene desde el pasado 26 de mayo, mientras que las altas epidemiológicas se mantuvieron también sin cambios, con 2.132 ciudadrealeños que han superado ya la enfermedad.